Sobre los TARTESSIOS

Pues ya está leído todo. He de confesar que en algunos apartados ha sido algo espeso. No podría comentar mucho sin acabar yo flotando en la ignorancia de muchas cosas, muchísimas cosas, apenas los posos que guarda el acompañamiento a una cultura general.

Al menos, aquí tenemos (o suponemos) la cabeza de un Gerión (a los pies de un faro) al que Hércules (que no fue un santo) dio con su vida ...

Iulianus82 escribió:

Los clásicos, hay que interpretarlos en el mejor de los casos. Yo lo que quiero son pruebas, evidencias, respuestas. ...

Yo soy muy de pensar así también. Empirísta por naturaleza, de signo Libra y gallego de nacimiento que duda más que habla. En el texto citas varias ocasiones "hipótesis" y alguna "falta de evidencias", creo que es normal porque lejos queda esa cultura, como normal es tener "ciertas" incertidumbres. En cualquier caso, mil gracias por semejante despliegue de información histórica.

Saludos

Tienes razón @Ric, a mí también me resultaba espeso conforme iba escribiendo, sobre todo señalando datos arqueológicos recurrentes (necrópolis que manifiestan registros en varios períodos, núcleos de población que lo mismo, deidades reiteradas también…) pero no podía dejar de aportar esos datos y no logré zafarme del enredo. Lo lamento, verás que otros pasajes resultan más amenos, más fluidos y espero que además jugosos, es lo que tiene condensar...

Respecto a los clásicos… pues están ahí y son gratis. ¿Qué hacemos? ¿Ignorarlos? Durante siglos han supuesto toda la información de que se disponía, después fueron ampliamente matizados por los primeros datos arqueológicos, y ahora resulta que unos y otros tienden a conciliarse (interpretando, claro).

Nadie dice que Tartessos fuera un reino cual “Dorado fabuloso”, pero del hecho de que así lo considerara el imaginario colectivo antiguo (el que conocemos: el mundo griego) indica que algo habría de cierto en ello. Y ese algo nos lo deja ya bien claro en la actualidad la arqueología: ingentes cantidades de escorias metálicas, distribución de poblados minero-metalúrgicos, mapa de nuevos asentamientos mineros, costeros y agrícolas, rutas a las que estos se ciñen, cronología de dichas expansiones... algo que desde luego no sería posible sin garantizarlo un poder centralizado. Que el influjo comercial (por tanto también cultural y hasta ideológico) fuera foráneo no lo duda nadie. ¿Pero dónde no lo es? ¿Dónde? De haber sido fenicia esa estructura protoestatal que llamamos Tartessos… ¿no hubieran impuesto su propio sistema político y su propio alfabeto? ¿No sería en ese caso conocida por los griegos (que no eran tontos, sabían distinguir y a los fenicios los tenían muy calaos) como “Nueva Fenicia”, “Nuevo Tiro”, “Fenicia de Occidente” o algo similar que designara de “quiénes” se trataba? ¿Se equivocaron de plano los griegos llamando a ese país Tarttessos y a sus reyes y pobladores tartessios? ¿Volvieron a equivocarse los griegos comerciando con tartessios sin saber que lo hacían con sus propios enemigos los “fenicios”? Parece inverosímil.

En fin, ahí están los clásicos y con estos los datos, se puede acudir a ellos para hacerse así una idea cabal. Por mi parte me remito a lo que dije más arriba al compañero Marqués del Duero: esto es España.

Gracias por leerlo e interesarte.  

Para mi después de leer tu post y diversos libros y artículos sobre las monedas de “mano” de Cástulo lo que desde antaño llamamos Ruta de la Plata ha cobrado un significado nuevo para mi…. La primera vez que la recorrí tenía “semanas” la última hace unos meses, presente en mi vida en muchos y variados aspectos, incluido el último “quiero que mis cenizas se tiren en el Rio Jerte …de más de un amigo y compañero.” Llevamos impresos en el ADN más recuerdos e información que nuestra disposición a sufrir una enfermedad específica…. Da qué pensar y sobre todo qué sentir.

Vaya @Marisiña, me has tocado la fibra.  El Jerte es uno de mis ríos favoritos, no solo en su valle sino también pasando por Plasencia, Carcaboso, Galisteo… Y otro tanto la Vera, tengo allí familia y voy muy a menudo. Me encanta todo aquello. La Ruta de la Plata documenta caminos ganaderos desde el neolítico, y mucho más desde la Edad del Bronce como decía en el post, o sea que estos tartessios, que la potenciaron para el estaño, la recibieron ya de su propia tradición "atlántica" y con ella las creencias que decía.

Buen camino para esas cenizas.