La sidra me encanta en Cantabria o Asturias, cuando la compro por aquí, no. No sabe lo mismo.
Un año nos fuimos a La Pesa en Asturias y cerquita de la casa rural que alquilamos había un restaurante al que íbamos casi todas las noches y nos pegábamos mi mujer y yo unas manás de sidra porque estaba buenísima. Eso sí, ya no te la escancian, te lo tienes que hacer tú, pero para eso han inventado un tapón que sale a chirillo fino para que no la tires fuera.