Hace unas semanas escribí y publiqué en Facebook un pequeño artículo sobre un billete local de un antiguo pueblo de la alpujarra almeriense, Darrícal. Nadie de este pueblo sabía nada de ese billete, el asombro fue total, tanto que me preguntaban por privado si era de verdad.
Creo que los pueblos no deben olvidar su historia y si lo han hecho, hay que enseñársela. Poco a poco, conforme vaya consiguiendo la documentación pertinente la iré contando. Me centraré principalmente en Almería y Granada.
Hoy comienzo con Berja (Almería), no son billetes raros pero tampoco abundan en las páginas de compraventa.
En tiempos de la República Española, debido a la escasez de moneda fraccionaria, los ayuntamientos republicanos decidieron por su cuenta y riesgo la emisión de billetes locales, avalados por ellos, para fomentar la actividad comercial de sus municipios.
El 19 de julio de 1937 el ayuntamiento de Berja se reúne y acuerdan lo siguiente:
“A propuesta del alcalde y para sanear momentáneamente la situación difícil del comercio y de los ciudadanos con la cuestión del cambio de billetes, se acuerda que el ayuntamiento emita moneda local litografiada para evitar posibles falsificaciones, la que firmará el Depositario del Consejo Municipal con su sello y cuya cantidad será la de 50.000 pesetas distribuidas en la siguiente forma:
-Cinco mil billetes de dos pesetas cada uno, diez mil pesetas.
-Veinte mil billetes de peseta, veinte mil pesetas.
-Veinte mil billetes de cincuenta céntimos, diez mil pesetas.
-Cuarenta mil billetes de veinticinco céntimos, diez mil pesetas.
Que hacen un total de cincuenta mil pesetas, cuya cantidad se lanzará a la circulación, prohibiendo la de toda clase de tiques comerciales, los que no podrán funcionar ni tendrán validez a partir de la fecha en la que se ponga en circulación la moneda de este Consejo, la que siempre se encuentra respaldada por las fuentes de ingresos municipales y será retirada de la circulación tan luego que la normalidad y las circunstancias lo aconsejen.
A esta cantidad de moneda local se dará ingreso en caja, como ingreso que se realiza circunstancialmente y que en su día ha de ser devuelto al canjearse por moneda del Estado”.
En el reverso de los billetes, siempre en blanco, presenta la numeración y sello del Consejo Municipal:
La impresión se encargó a la papelería almeriense Lacoste (situada donde estaba la papelería Avenida, en el Paseo de Almería número 2). El 19 de enero de 1938 se acuerda el pago a la imprenta y papelería Viuda de Emilio Lacoste de 50 pesetas por el trabajo.
Los billetes fueron firmados por Agustín Villegas Parrón, alias "el marquillas". Comerciante y militante anarcosindicalista responsable del sindicato minero de la CNT y de la colectivización de las minas de dicho municipio. Tras las elecciones de 1936 participó en la comisión gestora del ayuntamiento. Acabada la guerra fue condenado a muerte y fusilado en el cementerio de Almería.
El 3 de febrero de 1938 se requiere “por el Secretario del ayuntamiento a los Consejeros y especialmente a los miembros de la comisión de Hacienda para el pago del préstamo que para el depósito de los vales emitidos por el Consejo habrá que hacer efectivo en su día”. Para poder respaldar la emisión, el ayuntamiento tuvo que pedir un préstamo de 50.000 ptas al Banco Español de Crédito.
Una vez terminada la guerra y constituido el nuevo ayuntamiento, el 19 de abril de 1939 se abre la caja municipal y encuentran 38.081,95 pesetas en billetes municipales, rotos e inservibles, mandados retirar de la circulación y de difícil recuento dado su mal estado.
Si se emitieron 50.000 pesetas y se recogieron 38.081,95 ptas, quiere decir que quedaron 11.918,05 pesetas en billetes sin recoger, que son los que hoy en día aparecen en manos de coleccionistas.
Pero no fue sólo el ayuntamiento el que emitió billetes, también a título particular lo hizo el empresario, comerciante y prestamista virgitano Francisco Vázquez Gallardo.
Un saludo.