Son las siglas del fabricante. Por lo general, y esto era habitual en todos los países, cada fábrica, ya fuese particular o estatal, recibía una clave en forma de números o letras con la intención de que, caso de caer en manos del enemigo, no se pudiera saber de dónde procedía. Obviamente, la lista de claves era alto secreto... en teoría
SILENTIVM EST AVRVM