Y otros muchos que pertenecen a comunidades de vecinos.
Sin ir más lejos, la parte de abajo de una de las tiendas donde antes trabajaba, era un refugio de la guerra, construido también en aquella época y que comunicaba todos los edificios de la calle Ríos Rosas (Madrid).
Cada vez que tenía que bajar, unas tres o cuatro veces en once años, sentías que cada segundo que estabas ahí perdías cinco años de vida; ¡Que humedad, que frío, que escalofríos recorrían el cuerpo!
La discapacidad no es más que la dificultad de algunas personas de ver, que todos tenemos capacidades diferentes.