Conmemora la dorrota de Perseo, último rey de Macedonia, en el 167 a.C.; Pablo Emilio lo llevó, junto con sus dos hijos, en el cortejo de su carro triunfal.
Moneda acuñada para conmemorar la victoria sobre Perseo, último rey de Macedonia, que tuvo lugar en Pidna, con la participación de su antepasdo Paulo Emilio el Macedónico, quien en su paseo triunfal exhibió a Perseo junto con sus dos hijos prisioneros. Esta victoria permitió el sometimiento del pueblo de Macedonia y convirtiéndose en provincia tomana en el 148 a.C.
La Leyenda TER (tertius) quizás indique que este triunfo sobre Perseo era el tercer gran éxito de Paulo Emilio; su primer triunfo fue en 199 a.C. en Hispania y el segundo contra los ligures en el 181 a.C.
Este magistrado monetario fue hermano mayor de M. Aemilius Lepidus, quien gorbernaría en el segundo triunvirato junto con Marco Antonio y Octavio.
El busto de la Concordia de estas monedas es el recuerdo de un templo dedicado a esta diosa por la familia Aemilia.