Buenas amigos!
Paso a compartir con ustedes esta pieza griega, de las últimas en incorporarse a mi colección.
Se trata de una unidad de bronce acuñada entre 323 y 310 a.C. en una ceca incierta de Asia Menor, durante las Guerras de los Diádocos entre los sucesores de Alejandro, y a nombre del pequeño hijo de Alejandro Magno y Roxana, Alejandro IV.. quien no llegó a gobernar por la ambición de Casandro.
La pieza mide 15 milímetros y pesa 3,7 gramos.
Anverso: cabeza de Herakles orientada ligeramente hacia la derecha, dentro de dos círculos lineales, en el centro de un escudo de batalla macedonio adornado con cinco medialunas dobles.
Reverso: casco macedonio con cresta y orejeras, monograma PHA en el campo izquierdo y caduceo a la derecha.
Un poco de Historia..
Alejandro IV de Macedonia (323–309 a. C.) fue el segundo hijo de Alejandro Magno, que tuvo con su esposa Roxana, princesa de Bactria (después del ilegítimo Heracles, de su amante Barsine). Incluso antes de su nacimiento, Alejandro IV ya fue causa de desacuerdos entre los generales macedonios a la muerte de su padre en Junio de 323 a.C. Mientras los generales de Alejandro pensaban en proclamar como rey a Filipo Arrideo, hermano con deficiencias mentales de Alejandro Magno, Pérdicas prefería esperar, con la esperanza de que Roxana diera a luz a un varón. Se llegó al acuerdo de que Pérdicas gobernaría como regente, y Filipo Arrideo reinaría pero no mandaría. Si Roxana traía al mundo un varón, éste sería rey junto a su tío Filipo.
Pero tras las sangrientas Guerras de los Diádocos, en 311 a.C. se firmó una paz general entre Casandro, Antígono, Ptolomeo y Lisímaco. El tratado de paz reconocía los derechos de Alejandro IV al trono, según los cuales cuando llegara a la mayoría de edad sucedería a Casandro en el trono de Macedonia, y probablemente de todo el Imperio.
Pero en 309 a.C. acabaría la corta vida del hijo de Alejandro Magno. Casandro ordenó a Glaucias que lo asesinara, y la orden se cumplió con el envenenamiento de Alejandro IV y de su madre Roxana. De esta forma, Casandro eliminó al único obstáculo que impedía su dominio total sobre Macedonia, y a la vez terminaba con el último representante de la dinastía argéada.