Por lo general un billete impoluto está más lindo que uno desgastado, eso no lo vamos a discutir; pero hay desgastes y desgastes. Hay billetes que reflejan mucho trote pero presentan una imagen preciosa que nos emboba con cicatrices y todo, y por el contrario puede darse el caso de un billete prácticamente nuevo que por una manchita o un doblecito de nada en mal sitio nos produce un pellizco barriguero. Son cosas que escapan a los numeritos negros sobre fondo verde pero que al final es lo que hace que estés agusto con un billete en tu album o no.
Este que nos enseñas hoy está estupendo en cuanto a billete y muy guapo en cuanto a conservación (dicho esto obviamente desde mi gusto personal).
Y es que es este un billete que, bebiendo en los usos y formas clasiconas de la ABN consigue gran prestancia y no poca hermosura, a pesar del handicap importante que supone tener que incluir el rostro poco agraciado de Doña Guillermina (esto expresando también desde la subjetividad, no vaya a ser que salte alguien a quien la reinona esta le parezca guapa pues, como dijo aquel, "hay gente pa to").
Lo que sí me parece más objetiva es la no muy contundente pero bien clara expresión de mala leche que destila la Jefa. Menudo carácter debía tener. Apostaría a que esta de graciosa majestad nada de nada. Casi podríamos decir que causa más respeto el anverso con su cara que el reverso con los tres ejércitos juntos
Del reverso me ha gustado mucho la imagen dedicada a la Fuerza Aerea, con un ángulo heróico muy logrado. El avión por cierto es un Fokker DXXI holandés que, según cuentan, se doblegó ante la luftwaffe más por inferioridad numérica que técnica. Un dato interesante con respecto a este avión es que antes de la WWII la República nuestra en plena guerra civil se hizo con los derechos para construirlo en España en una maniobra del gobierno de Negrín intentando aflojar un poco la dependencia de los soviéticos. Según parece se inició su construcción y todo pero en esto sobrevivo el final de conflicto y la República se quedó descompuesta y sin Fokkers.
El barco no sé qué pueda ser (yo en barcos me quedé en la clase optimis de cuando íbamos a los campamentos de verano, así que solo puedo decir que un optimis no es
) y al tipo de infantería, yo por lo menos tampoco lo conozco de nada.
Una última cosa: Lo mismo que, por ejemplo, a las pounds británicas en castellano se las llama de toda la vida libras, a los gulden holandeses siempre se les llamó florines. Que yo sepa eso no ha cambiado ... Aunque claro, desde que a las magdalenas hay que llamarlas muffins, yo ya es que no me atrevo a asegurar nada