¡Muy bueno!
Yo en Buenos Aires voy tirando las monedas en un tarro y cuando tengo una cantidad respetable voy a comprar al chino del barrio y me hace un descuento del 10%. Eso sí, para el conteo de monedas la dueña usa tecnología digital (cuenta con el dedo) así que hay que ir con cierto tiempo y en horarios donde no haya clientes con apuros.