El timón de un barco romano tenía la forma de un remo, e iba montado sobre un eje por fuera del barco y se dirigía a mano.
El timón simbolizaba el buen gobierno, y su simbolismo se reforzaba con otro motivos, como la figura de una nave (que representaba al Estado), una victoria, una proa (rostrum), o un lábaro (estandarte).
El timón es un atributo de la Fortuna, y por lo general quiere decir que el titular dirige nuestros destinos. También muy representado con Laetitia en relación con las naves que aprovisionaban a Roma de grano.
Cuando se representa sobre globo indica el poderío naval del Imperio sobre los mares del mundo. Igualmente representa el buen gobierno del emperador, en que el timón, símbolo de la dirección correcta, se asocia con el globo terrestre.
Fortuna de pie con patera y timón sobre globo. Aureo de Faustina I. Roma 141 d.C.
Estante sobre proa de galera, portando pátera y timón. Antoniniano de Filipo I. Roma 245-247 d.C.
Globo, timón y cetro al que va unida una corona de laurel. Denario del Cuestor Cnaeus Cornelius Lentulus Marcellinus (Familia Cornelia). Hispania? 76-75 a.C.
Timón sobre globo. As de Tiberio. Roma 36-37 d.C.
Timón, espiga, hacha con fasces y caduceo. Moneda que alude al padre del monetario, quien años antes, siendo pretor en Sicilia, había organizado una flota durante la guerra social. Denario de Caius Norbanus (Familia Norbana). Roma 83 a.C.
Victoria guiando biga a dcha. portando palma; debajo timón. Denario del Tribuno del pueblo Marcus Cipius M.f. (Familia Cipia). 115-114 a.C.