Un investigador aclara los orígenes de Magallanes y la vida de la nao "Vitoria"

Me leí la ruta infinita, libro entretenido y de fácil lectura, fue una auténtica odisea, acabaron comiéndose las ratas y el cuero… Buscando el atajo de una ruta comercial acabaron haciendo la que se cree primera vuelta al mundo

¡Que gracioso me resulta que hablen de la "vida" de la Nave Victoria (Nao Vitória en Portugués), como si con la vida de la embarcación fuese una prolongación de la del navegante!

¿En serio que también ahora se va a discutir sobre el nombre de las embarcaciones? ¿Os imagináis que ahora venga alguien diciendo que aunque Magallanes murió donde y cuando murió, al final, resulta que en el barco iban sus ropajes o su cabeza (o un huevo suyo) y por tanto en espíritu esencia estaba allí con Johnny TheQanus?

En fin.
Saludos

Si mal no recuerdo, esa nao fue expropiada por la cara a unos comerciantes vascos, a la que se la compraron por cuatro duros. El nombre de los buques y también el de sus patronos iba cambiando, y a veces tenían incluso un mote.

La vida en esos buques debía ser un infierno muy infernal: hacinamiento, falta de comida y agua, violaciones...pfff. Tremendo. No sé si visteis la magnífica exposición que se hizo sobre Magallanes y la primera vuelta al Mundo en el Archivo de Indias en Sevilla. Sobrecogedor. De verdad que impactaba.

Os recomiendo escuchar dos podscast sobre el asunto: el de Jose Carlos en Memorias de un Tambor y el de Alejandro Hidalgo, de Historia Exprés. Ambos los tenéis en IVOX, de forma gratuita.

Pompeia Alba escribió:

La vida en esos buques debía ser un infierno muy infernal: hacinamiento, falta de comida y agua, violaciones...pfff. Tremendo...

Así es. Es harto complicado hacerse una idea - muy aproximada - de las condiciones de entonces en el mar (que ya eran malas en tierra). Mi padre, como marino mercante (Ingeniero Jefe de Máquinas, que hasta sufrió un hundimiento en el Golfo de México), gustaba de ver cualquier película (o leer libros) que tuviese el mar como protagonista y se gustaba a si mismo saber indicar a la perfección lo que era real de ficción.

La vida en alta mar - y no tan alta - siempre ha sido muy dura (por no emplear otra palabra) en cualquier travesía (o marea), incluso hoy día con todos los avances que quieras, lo sigue siendo. Ese infierno que dices llega con la falta de todo, e infernal cuando le añades las condiciones caprichosas del océano abierto a esas condiciones humanas penosas. Milagro es que "en llegando a un destino, un simple soplido no diese en el suelo de rodillas con cualquier recién llegado bravo marinero, con sus pies temblorosos de madera pisando tierra".

Saludos