EEUU. 50 Centavos 1859-O. Nueva Orleans. “SS Republic Wreck” (1865)

Hola a tod@s, hoy voy a presentar una monedilla que goza de bastante popularidad dentro del mundo de los naufragios al otro lado del charco y que además esconde una interesante y ajetreada historia. Se trata de una moneda de 50 Centavos acuñados en la ceca de Nueva Orleans (“O”) en el año 1859 y que formaba parte del cargamento del “SS Republic” en su viaje rumbo a Nueva Orleans.

Datos de la pieza:
País: Estados Unidos de América
Nominal: 50 Centavos de Dólar/Medio Dólar/Half Dollar
Año: 1859
Ceca: Nueva Orleans (Letra “O”, debajo de las patas del águila, en el reverso)
Metal: Plata de 900 milésimas.
Peso: 12,44 gramos (teórico)
Diámetro: 30,6 milímetros (aprox.).
Canto: Estriado
Forma: Redonda
Alineación: Moneda (180°)
Estado de conservación: “Shipwreck effect”. El anverso muestra signos corrosión marina en la mitad superior de la pieza, pero que no afecta a la alegoría de la “Libertad sentada”, con las estrellas a su alrededor y la fecha visibles. También se aprecia perfectamente  la leyenda “Liberty” del escudo. En cuanto al reverso, muestra el águila con el escudo central, así como la rama de olivo y las flechas en sus garras. Se aprecia la leyenda completa y la marca de ceca. Menor corrosión en esta cara, aunque con signos muy evidentes en la mitad derecha. Las zonas donde se muestra la corrosión están oscurecidas en ambas caras, pero sin dañar la pieza y manteniendo los datos relevantes visibles. La moneda ha sido restaurada tras el rescate y ha sido certificada por la prestigiosa “NGC” bajo la categoría “Shipwreck Effect” (sin incluir grado).
Tirada: Se estima que se acuñaron 2.834.000 unidades en la ceca de referencia, pero se desconoce el número de ejemplares que iban a bordo del barco entre la carga oficial y las pertenencias de los viajeros.
Diseño: Christian Gobrecht (ambas caras)
Referencias bibliográficas: “KM# A68”
Rareza: Rara. Ya no sólo por proceder de un rescate marino, sino por no comercializarse de forma tan poco habitual fuera de los EEUU y gozar de una gran popularidad en ese país.
Pecio: “SS Republic”. Un barco a vapor con bandera norteamericana que se hundió frente a las costas de Georgia debido a un fuerte huracán. Primeramente sirvió como barco civil y, posteriormente se le otorgó un fin militar en ambos bandos durante la Guerra de Secesión norteamericana, para luego regresar al transporte civil. Su cargamento solía incluir artículos de la vida cotidiana en el sur americano, así como herramientas para el desarrollo de esta zona del país una vez finalizada la Guerra Civil. Además, el flujo de personas era una constante, pero en su último viaje, este barco llevaba también unos 500 barriles que contenían poco más de 50.000 monedas de oro y plata.
Leyendas:
Anv.: Alegoría de la Libertad sentada sobre una roca que representa a la nación norteamericana mientras sostiene en su mano izquierda una lanza con un gorro frigio en la punta, en alusión a la república. Además, sujeta con su mano derecha un escudo, que reposa sobre el suelo, con las barras americanas y una cinta que lo atraviesa con la leyenda “LIBERTY”. A su alrededor, se aprecian 13 estrellas de 6 puntas cada una y, bajo la misma, la fecha de acuñación de la moneda, “1859”. Signos de corrosión marina en la mitad superior de la moneda.
Rev.: “UNITED ESTATES OF AMERICA” alrededor de la representación de un águila con las alas desplegadas y que mira hacia la izquierda (desde nuestra perspectiva), mientras porta una rama de laurel en su pata derecha y un haz de flechas en la izquierda. Bajo ella, letra “O” en alusión a la ceca y el valor nominal abreviado, “HALF DOL.”. Corrosión marina en la mitad derecha de la pieza.
Observaciones: La pieza en cuestión presenta las oxidaciones propias de una moneda que ha permanecido casi 144 años bajo el mar, pero que a pesar de esto, no ha perdido los detalles que permiten su correcta identificación, por lo que esta moneda en cuestión es un fiel testigo de la historia norteamericana y documenta el estilo de vida en los territorios sureños después de la Guerra Civil. Con todo ello, aún permanecen visibles todos los elementos propios de esta pieza en cuestión, con oxidaciones marinas que no afectan a la estructura de la pieza y diseño.
El barco y su contexto histórico: Bautizado inicialmente como “SS Tennessee”,  este impresionante vapor de unos 64 metros de largo y 10 metros de ancho, fue botado al agua durante el mes de agosto de 1853. Inicialmente, cubriría la ruta que une Baltimore (Maryland) y Charleston (Carolina del Sur) como barco de transporte de pasajeros donde era habitual encontrar buscadores de oro que venían de todas partes del país a probar fortuna en el sur americano.
Sin embargo, la tensión que ya se vivía durante años entre los Estados de Norte, contrarios a la esclavitud y los del Sur, favorables a la utilización de este tipo de mano de obra, fundamentalmente para las explotaciones agrícolas, llevaron al estallido de la Guerra Civil norteamericana en 1861.
El rápido avance de los uniformados confederados en los primeros compases de la guerra implicaron la toma de Nueva Orleans, donde se encontraba en ese momento el “SS Tennessee” y dadas sus dimensiones, éstos no dudaron en buscarle una finalidad durante el conflicto, combatiendo activamente contra la flota de la Unión.
Sin embargo, no sirvió mucho tiempo bajo la bandera de la Confederación puesto que, tan sólo un año después, las fuerzas de la Unión conquistaron Nueva Orleans y éstos lo volverían a asignar como vapor de guerra, rebautizado como “USS Tennessee”. Con su entrada nuevamente en servicio, sería el nuevo buque insignia del Norte e intervendría en varias batallas navales, destacando la victoria unionista  en “Mobile Bay” en 1864. Tras ella, sería rebautizado por segunda vez, precisamente con el nombre de “USS Mobile” en honor al éxito cosechado en esa batalla. Finalmente y ya en pleno otoño recibiría importantes daños debido a una devastadora tormenta, lo que supondría su retirada definitiva del frente bélico para regresar a su antigua misión, el transporte civil de pasajeros después de ser subastado. Es aquí cuando sería nuevamente bautizado con el nombre por el que lo conocemos hoy, el “SS Republic” y se le asignaría el puerto de Nueva York como su nueva base de operaciones. Su misión, el transporte regular desde esta nueva base hasta la antigua, en Nueva Orleans para llevar pasajeros, materiales y recursos económicos que ayudaran a levantar los Estados del Sur, ahorra arrasados tras el conflicto bélico.
Su último viaje: En octubre de 1865 partiría rumbo a Nueva Orleans con pasajeros en busca de nuevos destinos, así como una carga de lo más variada que, para esta ocasión, también incluía unos 500 barriles que contenían más de 50.000 monedas de oro y plata para ayudar a la reconstrucción y aliviar su economía. Todo ello sin olvidar las pertenencias y dinero personal de los pasajeros que también iban a bordo. De esta forma, el 25 de octubre el barco entraría en aguas embravecidas y una tripulación horrorizada descubriría que se encontraban frente a un violento huracán, algunos dicen que ya era el cuarto al que este barco se enfrentaba durante su vida, sólo que en esta ocasión, la fuerza del agua y los vientos acabaron por superarlo y el “SS Republic” terminaría sucumbiendo a unas 100 millas frente a las costas de Georgia.
El número de vidas que se perdieron no ha trascendido con exactitud, pero se sabe que la mayoría de los pasajeros y la tripulación lograron aferrarse a los restos flotantes del barco y serían rescatados en la zona horas después. Su carga, historia y legado, permanecerían así en el olvido hasta nuestros días.
El rescate: En el año 2003, la compañía caza tesoros “Odyssey Marine Exploration” realizó los trabajos de localización del pecio y recuperación de los objetos a bordo valiéndose de las técnicas más avanzadas del momento, así como el uso pionero de robots submarinos a esas profundidades, el famoso “Zeus”. Sin duda, su labor sentó un precedente sobre la metodología y el correcto uso tecnológico en naufragios a una profundidad significativa, rescatando en torno a las 51.000 monedas de oro y plata, de acuerdo a los datos remitidos por la propia “Odyssey”, así como unos 14.000 artefactos que iban a bordo del barco y que arrojan información sobre el estilo de vida de las personas en aquella época y la situación económica después de la Guerra Civil.
Ciertamente muchos de ellos nutren en la actualidad las vitrinas de muchos museos, algunos incluso fuera de los EEUU, así como colecciones numismáticas privadas que hacen las delicias del coleccionista americano y de aquellos fascinados por los naufragios y sus historias. La propia “Odyssey” tiene un “museo virtual” con algunas de las piezas rescatadas y puede consultarse en la siguiente URL: https://www-odysseysvirtualmuseum-com.translate.goog/?_x_tr_sch=http&_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=op,sc
Curiosidades: A nivel numismático, se rescataron gran cantidad de monedas de oro de distintos valores, con especial importancia de aquellas con denominación de “20 Dólares”,  la mayoría acuñadas en cecas sureñas. También es necesario destacar la importancia de los “50 Centavos” del tipo “Seated Liberty”, no sólo a nivel cuantitativo, sino porque se identificaron en torno a 45 tipos o variantes distintas de este diseño. A modo de ejemplo, algunas tenían “flechas” a ambos lados de la ceca y otras no. El valor total del tesoro recuperado se estimó, de acuerdo a los cálculos de la propia “Odyssey”, en torno a los 150 millones dólares en el momento del rescate, nada mal para aquel momento y, sobre todo, procediendo de un pecio de estas características y con un importantísimo legado en la historia americana. Las monedas rescatadas, fueron posteriormente certificadas por la empresa americana “NGC”, con gran experiencia en el sector y un servicio específico para graduar piezas de naufragios. La colaboración supuso la creación de una etiqueta específica para este pecio, sin graduación sobre la escala Sheldon para las piezas de plata, bajo la denominación “Shipwreck Effect” y la asignación de un grado numérico a las monedas de oro dada su extraordinaria conservación y resistencia al agua salada. Esta forma de operar es similar a la certificación por parte de esta misma compañía, en el caso de las piezas procedentes del “SS New York”.
También se debe señalar que, durante los trabajos de rescate, se localizaron importantes cantidades de carbón, almacenados en el barco para su uso en las calderas del mismo y supuso que algunas monedas y artefactos presentaran una tonalidad oscura o negra sobre su superficie. Muchos de estos fragmentos llegaron a comercializarse individualmente como “efectos” procedentes del pecio y otros se incluyeron en una serie numismática que detallamos a continuación de forma breve.
Una serie numismática moderna: En 2013, el estado insular de Niué, en colaboración con la empresa privada alemana “B.H. Mayer Kunstprägeanstalt” y “Liechtenstein Coin Invest Trus”, fiel a su estilo de crear piezas de coleccionismo basada en hitos históricos mundiales, personajes reales o ficticios y otras acuñaciones, crean dos piezas para conmemorar el descubrimiento del “SS Republic”. La primera, realizada en plata de 925 milésimas tiene un valor de 5 “dólares de Nueva Zelanda”, pesa 25 gramos y se ha elegido un diseño ovalado para esta acuñación, con una tirada limitada de 1.865 ejemplares, en clara alusión al año del naufragio del “SS Republic”. Se incluye en esta moneda, un pequeño fragmento del carbón original rescatado del pecio.
Para la segunda moneda, se le asigna un valor facial de “1 Dólar”, con un peso de 0,5 gramos de oro de 9999 milésimas, forma redonda y una emisión de 15.000 unidades. Todo un homenaje para este importantísimo pecio.

Fotos:





Espero que os guste!  
Saludos.

Preciosa moneda y preciosa historia

fantástica moneda y gran historia sin duda. Gracias por el rato de interesante lectura veraniega.

Muy currado.
Gracias por contarnos esa historia tan interesante y enhorabuena por la moneda.

Enhorabuena @INSULARVM
Muy buena historia, y muy buena moneda. Los pequeños rastros de corrosíon no la desmerece en absoluto.

INSULARVM escribió:

Hola a tod@s, hoy voy a presentar una monedilla que goza de bastante popularidad dentro del mundo de los naufragios al otro lado del charco y que además esconde una interesante y ajetreada historia. Se trata de una moneda de 50 Centavos acuñados en la ceca de Nueva Orleans (“O”) en el año 1859 y que formaba parte del cargamento del “SS Republic” en su viaje rumbo a Nueva Orleans.

Datos de la pieza:
País: Estados Unidos de América
Nominal: 50 Centavos de Dólar/Medio Dólar/Half Dollar
Año: 1859
Ceca: Nueva Orleans (Letra “O”, debajo de las patas del águila, en el reverso)
Metal: Plata de 900 milésimas.
Peso: 12,44 gramos (teórico)
Diámetro: 30,6 milímetros (aprox.).
Canto: Estriado
Forma: Redonda
Alineación: Moneda (180°)
Estado de conservación: “Shipwreck effect”. El anverso muestra signos corrosión marina en la mitad superior de la pieza, pero que no afecta a la alegoría de la “Libertad sentada”, con las estrellas a su alrededor y la fecha visibles. También se aprecia perfectamente  la leyenda “Liberty” del escudo. En cuanto al reverso, muestra el águila con el escudo central, así como la rama de olivo y las flechas en sus garras. Se aprecia la leyenda completa y la marca de ceca. Menor corrosión en esta cara, aunque con signos muy evidentes en la mitad derecha. Las zonas donde se muestra la corrosión están oscurecidas en ambas caras, pero sin dañar la pieza y manteniendo los datos relevantes visibles. La moneda ha sido restaurada tras el rescate y ha sido certificada por la prestigiosa “NGC” bajo la categoría “Shipwreck Effect” (sin incluir grado).
Tirada: Se estima que se acuñaron 2.834.000 unidades en la ceca de referencia, pero se desconoce el número de ejemplares que iban a bordo del barco entre la carga oficial y las pertenencias de los viajeros.
Diseño: Christian Gobrecht (ambas caras)
Referencias bibliográficas: “KM# A68”
Rareza: Rara. Ya no sólo por proceder de un rescate marino, sino por no comercializarse de forma tan poco habitual fuera de los EEUU y gozar de una gran popularidad en ese país.
Pecio: “SS Republic”. Un barco a vapor con bandera norteamericana que se hundió frente a las costas de Georgia debido a un fuerte huracán. Primeramente sirvió como barco civil y, posteriormente se le otorgó un fin militar en ambos bandos durante la Guerra de Secesión norteamericana, para luego regresar al transporte civil. Su cargamento solía incluir artículos de la vida cotidiana en el sur americano, así como herramientas para el desarrollo de esta zona del país una vez finalizada la Guerra Civil. Además, el flujo de personas era una constante, pero en su último viaje, este barco llevaba también unos 500 barriles que contenían poco más de 50.000 monedas de oro y plata.
Leyendas:
Anv.: Alegoría de la Libertad sentada sobre una roca que representa a la nación norteamericana mientras sostiene en su mano izquierda una lanza con un gorro frigio en la punta, en alusión a la república. Además, sujeta con su mano derecha un escudo, que reposa sobre el suelo, con las barras americanas y una cinta que lo atraviesa con la leyenda “LIBERTY”. A su alrededor, se aprecian 13 estrellas de 6 puntas cada una y, bajo la misma, la fecha de acuñación de la moneda, “1859”. Signos de corrosión marina en la mitad superior de la moneda.
Rev.: “UNITED ESTATES OF AMERICA” alrededor de la representación de un águila con las alas desplegadas y que mira hacia la izquierda (desde nuestra perspectiva), mientras porta una rama de laurel en su pata derecha y un haz de flechas en la izquierda. Bajo ella, letra “O” en alusión a la ceca y el valor nominal abreviado, “HALF DOL.”. Corrosión marina en la mitad derecha de la pieza.
Observaciones: La pieza en cuestión presenta las oxidaciones propias de una moneda que ha permanecido casi 144 años bajo el mar, pero que a pesar de esto, no ha perdido los detalles que permiten su correcta identificación, por lo que esta moneda en cuestión es un fiel testigo de la historia norteamericana y documenta el estilo de vida en los territorios sureños después de la Guerra Civil. Con todo ello, aún permanecen visibles todos los elementos propios de esta pieza en cuestión, con oxidaciones marinas que no afectan a la estructura de la pieza y diseño.
El barco y su contexto histórico: Bautizado inicialmente como “SS Tennessee”,  este impresionante vapor de unos 64 metros de largo y 10 metros de ancho, fue botado al agua durante el mes de agosto de 1853. Inicialmente, cubriría la ruta que une Baltimore (Maryland) y Charleston (Carolina del Sur) como barco de transporte de pasajeros donde era habitual encontrar buscadores de oro que venían de todas partes del país a probar fortuna en el sur americano.
Sin embargo, la tensión que ya se vivía durante años entre los Estados de Norte, contrarios a la esclavitud y los del Sur, favorables a la utilización de este tipo de mano de obra, fundamentalmente para las explotaciones agrícolas, llevaron al estallido de la Guerra Civil norteamericana en 1861.
El rápido avance de los uniformados confederados en los primeros compases de la guerra implicaron la toma de Nueva Orleans, donde se encontraba en ese momento el “SS Tennessee” y dadas sus dimensiones, éstos no dudaron en buscarle una finalidad durante el conflicto, combatiendo activamente contra la flota de la Unión.
Sin embargo, no sirvió mucho tiempo bajo la bandera de la Confederación puesto que, tan sólo un año después, las fuerzas de la Unión conquistaron Nueva Orleans y éstos lo volverían a asignar como vapor de guerra, rebautizado como “USS Tennessee”. Con su entrada nuevamente en servicio, sería el nuevo buque insignia del Norte e intervendría en varias batallas navales, destacando la victoria unionista  en “Mobile Bay” en 1864. Tras ella, sería rebautizado por segunda vez, precisamente con el nombre de “USS Mobile” en honor al éxito cosechado en esa batalla. Finalmente y ya en pleno otoño recibiría importantes daños debido a una devastadora tormenta, lo que supondría su retirada definitiva del frente bélico para regresar a su antigua misión, el transporte civil de pasajeros después de ser subastado. Es aquí cuando sería nuevamente bautizado con el nombre por el que lo conocemos hoy, el “SS Republic” y se le asignaría el puerto de Nueva York como su nueva base de operaciones. Su misión, el transporte regular desde esta nueva base hasta la antigua, en Nueva Orleans para llevar pasajeros, materiales y recursos económicos que ayudaran a levantar los Estados del Sur, ahorra arrasados tras el conflicto bélico.
Su último viaje: En octubre de 1865 partiría rumbo a Nueva Orleans con pasajeros en busca de nuevos destinos, así como una carga de lo más variada que, para esta ocasión, también incluía unos 500 barriles que contenían más de 50.000 monedas de oro y plata para ayudar a la reconstrucción y aliviar su economía. Todo ello sin olvidar las pertenencias y dinero personal de los pasajeros que también iban a bordo. De esta forma, el 25 de octubre el barco entraría en aguas embravecidas y una tripulación horrorizada descubriría que se encontraban frente a un violento huracán, algunos dicen que ya era el cuarto al que este barco se enfrentaba durante su vida, sólo que en esta ocasión, la fuerza del agua y los vientos acabaron por superarlo y el “SS Republic” terminaría sucumbiendo a unas 100 millas frente a las costas de Georgia.
El número de vidas que se perdieron no ha trascendido con exactitud, pero se sabe que la mayoría de los pasajeros y la tripulación lograron aferrarse a los restos flotantes del barco y serían rescatados en la zona horas después. Su carga, historia y legado, permanecerían así en el olvido hasta nuestros días.
El rescate: En el año 2003, la compañía caza tesoros “Odyssey Marine Exploration” realizó los trabajos de localización del pecio y recuperación de los objetos a bordo valiéndose de las técnicas más avanzadas del momento, así como el uso pionero de robots submarinos a esas profundidades, el famoso “Zeus”. Sin duda, su labor sentó un precedente sobre la metodología y el correcto uso tecnológico en naufragios a una profundidad significativa, rescatando en torno a las 51.000 monedas de oro y plata, de acuerdo a los datos remitidos por la propia “Odyssey”, así como unos 14.000 artefactos que iban a bordo del barco y que arrojan información sobre el estilo de vida de las personas en aquella época y la situación económica después de la Guerra Civil.
Ciertamente muchos de ellos nutren en la actualidad las vitrinas de muchos museos, algunos incluso fuera de los EEUU, así como colecciones numismáticas privadas que hacen las delicias del coleccionista americano y de aquellos fascinados por los naufragios y sus historias. La propia “Odyssey” tiene un “museo virtual” con algunas de las piezas rescatadas y puede consultarse en la siguiente URL: https://www-odysseysvirtualmuseum-com.translate.goog/?_x_tr_sch=http&_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=op,sc
Curiosidades: A nivel numismático, se rescataron gran cantidad de monedas de oro de distintos valores, con especial importancia de aquellas con denominación de “20 Dólares”,  la mayoría acuñadas en cecas sureñas. También es necesario destacar la importancia de los “50 Centavos” del tipo “Seated Liberty”, no sólo a nivel cuantitativo, sino porque se identificaron en torno a 45 tipos o variantes distintas de este diseño. A modo de ejemplo, algunas tenían “flechas” a ambos lados de la ceca y otras no. El valor total del tesoro recuperado se estimó, de acuerdo a los cálculos de la propia “Odyssey”, en torno a los 150 millones dólares en el momento del rescate, nada mal para aquel momento y, sobre todo, procediendo de un pecio de estas características y con un importantísimo legado en la historia americana. Las monedas rescatadas, fueron posteriormente certificadas por la empresa americana “NGC”, con gran experiencia en el sector y un servicio específico para graduar piezas de naufragios. La colaboración supuso la creación de una etiqueta específica para este pecio, sin graduación sobre la escala Sheldon para las piezas de plata, bajo la denominación “Shipwreck Effect” y la asignación de un grado numérico a las monedas de oro dada su extraordinaria conservación y resistencia al agua salada. Esta forma de operar es similar a la certificación por parte de esta misma compañía, en el caso de las piezas procedentes del “SS New York”.
También se debe señalar que, durante los trabajos de rescate, se localizaron importantes cantidades de carbón, almacenados en el barco para su uso en las calderas del mismo y supuso que algunas monedas y artefactos presentaran una tonalidad oscura o negra sobre su superficie. Muchos de estos fragmentos llegaron a comercializarse individualmente como “efectos” procedentes del pecio y otros se incluyeron en una serie numismática que detallamos a continuación de forma breve.
Una serie numismática moderna: En 2013, el estado insular de Niué, en colaboración con la empresa privada alemana “B.H. Mayer Kunstprägeanstalt” y “Liechtenstein Coin Invest Trus”, fiel a su estilo de crear piezas de coleccionismo basada en hitos históricos mundiales, personajes reales o ficticios y otras acuñaciones, crean dos piezas para conmemorar el descubrimiento del “SS Republic”. La primera, realizada en plata de 925 milésimas tiene un valor de 5 “dólares de Nueva Zelanda”, pesa 25 gramos y se ha elegido un diseño ovalado para esta acuñación, con una tirada limitada de 1.865 ejemplares, en clara alusión al año del naufragio del “SS Republic”. Se incluye en esta moneda, un pequeño fragmento del carbón original rescatado del pecio.
Para la segunda moneda, se le asigna un valor facial de “1 Dólar”, con un peso de 0,5 gramos de oro de 9999 milésimas, forma redonda y una emisión de 15.000 unidades. Todo un homenaje para este importantísimo pecio.

Fotos:





Espero que os guste!  
Saludos.

Felicitaciones

Hola a tod@s, gracias por comentar la pieza y, sobre todo, que les gusten estas monedas de naufragios tanto como a mi, pues tienen historias únicas que contar y hacen de esta afición algo realmente apasionante Saludos.