¿Vale más un Farthing que mil Pounds?

Él, sentado en su sillón de terciopelo rojo, a oscuras como solía hacer apenas alumbrado por aquél ínfimo fuego de su lampara de aceite. Él, dejándose la vista leyendo y leyendo libros antiguos, asegurándose que nada ni nadie enturbiarse su lectura.
Él, viviendo en aquella mansión alejada de la ciudad y del ruido que producían sus aldeanos. Él, no paraba de leer y releer sus antiguos libros sobre numismática sin que nada en este mundo le importase más.
Él, que rechazaba cualquier visita, él, que despreciaba la vida social y se podría decir que la vida en general

Sir Kaine era un hombre que lo había tenido todo en la vida, pertenecía a la clase social mas importante del imperio. Sus antiguos negocios en las colonias de la India y Hong-Kong le habían deparado una fortuna desmesurada. Todo le sonreía menos una cosa.
Su esposa fue víctima de un naufragio en el océano Indico en un viaje que serviría para reunirse con él. A partir de entonces dejó sus negocios, su vida pública y se refugió en su mansión ubicada en la región de Cornualles.
Sir Kaine tenía miles y miles de libras todas y cada una guardadas en un armario de su biblioteca, todas eran de oro, pues rechazaba los billetes, nunca le gustaron. Solo oro.
Sus sirvientes vieron como un gran hombre de negocios moría en aquella habitación siempre a oscuras, siempre leyendo. La gran cantidad de oro que guardaba y que nunca ni por asomo se acercaba a ver a aquel armario.
Solo llevaba consigo siempre una moneda que nunca gastaba, pues sus sirvientes pagaban en las pocas ocasiones que salía a la ciudad. Una moneda que según contaban sus más allegados era la única pertenencia que llego a la costa junto con el cuerpo de su esposa. Aquél era el único recuerdo que tenía de ella junto a las pocas fotografías juntos y a el cuadro de la biblioteca donde su retrato presidía la estantería principal.
Su vida, desde el naufragio donde murió su esposa, se acabó. Solo le quedaba dinero dinero y dinero. Pero jamas el dinero de oro fue apreciado en lo más mínimo por Sir Kaine, solo era capaz de apreciar como un tesoro el Farthing que llevaba su esposa el día del desastre.
Sir Kaine murió en 1901 y su testamento reflejó fielmente sus últimos años, el oro para sus sirvientes y el farthing enterrado con él.
Él, que nadaba entre los más ricos, él que poseía mas oro que nadie en el imperio, él que sus negocios fueron todo un ejemplo para el imperio, él se hizo enterrar con su posesión mas preciada. El farthing de su esposa...






Espero que os guste.

Es una moneda muy bonita con una historia muy emotiva.
Te felicito por las dos cosas.

Emotiva historia y como siempre el dinero no da la felicidad...
Muy bonita moneda enhorabuena por ella

Muchas gracias @Fredericus y @Bujia me alegra que os gusten, la historia y la moneda. Gracias

En tu línea MAESTRO
Un Saludo.
Sol Mar

Bonita moneda... excelente relato! ya me estoy acostumbrando a leer toda la publicación... jajaja.

Muchas gracias amigos @Benyusuf @Sol Mar y @Armintza79 me alegra que os guste.
Sol Mar... No soy maestro de nada, quizás un loco que se le ocurre una historia en cinco segundos y según viene la escribe.
Socio, celebro que leas hasta el final mis historietas!! Mi locura por escribir ya sabe que tendrá un lector más jejeje
Gracias a todos.

A por otra, yo estoy aquí "improvisando"; esta mañana se me averió el ordeñador;
ahora parece que si va, así que aprovecharemos...
Que racha llevo, la Prensa de Acuñar, me quedo sin Material... pues eso a "Improvisar"
pero a ver si me da tiempo y te pongo "algo",....

Entrañable historia que acompaña a una moneda preciosa. ¡Pobre hombre rico!, me ha recordado el final de la película de Ciudadano Kane (casi el mismo apellido) de Orson Welles y "su rosebud". Estás creando afición y adicción en el foro a tus relatos y a tus monedas...
Un abrazo, amigo.

Muchas gracias Gobierno. Ya te dije... Tengo un buen maestro!!
Ciudadano Kaine, no en realidad me ha venido el nombre de un jugador de fútbol jejeje

Me encantan

mail escribió:

Me encantan

Muchas gracias Mail, esta se me ha ocurrido en nada y no sabia como iba a quedar, pero parece que ha quedado bien.
Gracias

Muchas gracias @Keko y @Txabs me alegra que os guste mi historieta.

No es una historieta, eso es peyorativo... llámalo por su nombre, es un cuento

solo falta que Sol Mar me saque un PDF de los suyos titulado Los Cuentos numismáticos de 10 Pfennig jeje

10 pfennig escribió:

 solo falta que  Sol Mar me saque un PDF de los suyos titulado Los Cuentos numismáticos de 10 Pfennig jeje

Pues algo había pensado......
Un Saludo
Sol Mar

Sol Mar escribió:

Pues algo había pensado......
Un Saludo
Sol Mar

Muchas gracias Sol Mar, solo el hecho de que lo pienses... para mi ya es un logro

Bonita historia!

Gracias Iulianus82, me alegra que te guste.

Salvo por el hecho de que mi mujer está vivita y coleando, me he visto reflejado en esa historia, sólo me importan las monedas y billetes (las de antes,bueno ... las de ahora también pero no a este extremo   ) , puedo descartar la vida social sólo por el hecho de verlas y reverlas, escudriñarlas, investigarlas y leer. Y cuando me vaya al hoyo que lo metan todo junto con la caja.  Es triste , pero es así.
Para mí , el mejor relato hasta ahora, me ha tocado fibra.
Apoyaría ese proyecto recopilatorio de nuestro insigne Bibliotecario, ya sabes compi @Sol Mar, tus honorarios corren de mi cuenta en "Hamburgo", pero no serán ni euros ni marcos.
En cuanto al Farthing, a pesar de ser una bonita pieza, lo has eclipsado con tu historia de tal manera, que casi pasa desapercibido y tampoco quisiera que fuera así.
Volviendo a la idea que saco de tu historia, trasladada a nuestros dias, es que la pasión que nos mueva en este "mundillo nuestro" nos impida relacionarnos con otras personas fuera de los límites de la numismática. Una cosa no quita la otra, aunque no siempre ésto sea así y no siempre sea fácil desligarlo.
Recibe mi enhorabuena por este ENORME relato. Por mi, lo pondría de chincheta para aviso a navegantes.

                                                       

Gracias @Ajuntachapas
No hay que exagerar, todos los que estamos aquí somos un "poco" así como mencionas. Fijaté en mí que hasta la reina Guillermina me habla y si no que se lo digan a @Fredericus
Lo de la chincheta de aviso, me vais a entre todos.
Muchas

PD: lo mismo me vuelvo como los antiguos egipcios un saqueador de tumbas

…. Sobre montar un PDF..., ando un poco atareado; uno bueno se podría hacer con el material
que se está poniendo en el "Concurso"; de hecho ya comencé uno (es posible que aún lo tenga por ahí)
en el concurso de hace dos años...
Un Saludo.
Sol Mar