Francia veta que se acuñe una moneda de dos euros

Han pasado 200 años, pero para los franceses sigue siendo una humillación, un trauma nacional del que aún no se han recuperado. Hablamos de la famosa batalla que el 18 de junio de 1815 se libró a las afueras de la localidad belga de Waterloo y en la que las tropas guiadas por Napoleón sufrieron una denigrante derrota a manos de los soldados británicos, holandeses y alemanes capitaneados por el Duque de Welligton. Ese descalabro militar sigue siendo tan punzante para los franceses que París ha vetado la emisión de una moneda conmemorativa de dos euros que Bélgica quería acuñar para celebrar el bicentenario de esa célebre batalla.

http://www.elmundo.es/internacional/2015/03/12/5501690422601d5c3f8b4577.html

UN SALUDO

Anda, pues ellos bien que lucen en su arco del triunfo el nombre de las batallas en las que derrotaron a sus contrarios.

Y no passsa na´, como dice J Mota.

Kabroncetes...jeje los gabachos (con cariño) pueden contar chistes de belgas pero los belgas no pueden comentar Waterloo...

Manda narices... ellos bien que conmemoran a sus gobernantes (Napoleon) que invadieron media Europa y cuando otro pais quiere conmemorar una batalla de hace 200 años... "no no no no no no por dios, no... que aun no lo hemos superado... pero a que jode cuando os invadimos, he?¿?¿ Ala, ahí teneis la monedita para recordarlo..."

Se nota que me la han liado mas de una vez los franceses, no?¿ jejejeje

ago1989 escribió:

Manda narices... ellos bien que conmemoran a sus gobernantes (Napoleon) que invadieron media Europa y cuando otro pais quiere conmemorar una batalla de hace 200 años... "no no no no no no por dios, no... que aun no lo hemos superado... pero a que jode cuando os invadimos, he?¿?¿ Ala, hay teneis la monedita para recordarlo..."

Se nota que me la han liado mas de una vez los franceses, no?¿ jejejeje

Si a ti te vetaran una conmemorativa, tu que harías? Pues es lo que ha hecho Francia. Los belgas vetaron su CC de la batalla de Marignano.

Eso no lo sabia

Pero leches... que cada pais acuñe lo que le de la gana...

La verdad es que cuando paseas por francia te encuentras una estatua de Napoleón en cada esquina, con lo que no me extrañaría que cualquier día hagan una moneda conmemorativa con el busto de Napoleón. Evidentemente no hay estatuas de Napoleón, como por ejemplo en España. Pero lo que me quedé asombrado es de la que vi hace pocos días en Varsovia:



¿Y por qué? Pues porque Napoleón creó el Ducado de Varsovia como germen (pensaron los polacos) de un reino Polaco.

Así que ya veis que cada uno habla de la feria según le ha ido en ella.

Salud.

Por cierto deberíamos hacer los españoles una conmemorativa de la batalla de Bailén.

Y una en recuerdo a todos los muertos de la Guerra Civil del '36.

Ya no hablo de bando Republicano o Nacional, por que al final, no fue acaso guerra de hermano contra hermano... (En el caso de mi familia literal).

A todo el mundo (expresión usada para englobar a la Humanidad en su totalidad, desde españoles a papuoneoguineanos) que tenga un mínimo de sentido nacional le agrada rememorar los buenos momentos de su pais y encuentra desagradable que le anden recordando pasadas miserias históricas. A los franceses, que al fin y a la postre también somos seres humanos y por tanto experimentamos las mismas reacciones básicas que en cualquier otra "tribu" o latitud, también nos pasa.

Como, en efecto y a pesar de todo, la batalla de Waterloo no es tratada en el sentimiento colectivo francés como uno de nuestros mejores momentos, no me resisto antes de dar mi opinión sobre el asunto en cuestión, a hacer alguna precisión al comentario de Moski sobre la batalla (a título de opinión, claro está. Por favor perdonadme. Son cosas del nacionalismo. Sé que no tengo que explicaroslo a vosotros los españoles porque gracias al milagro de la doble nacionalidad yo también lo soy ).

En el periodo que conocemos como "los 100 días", el último estertor del imperio napoleónico tuvo que hacer frente (él mismo se lo había buscado, es verdad) a prácticamente toda Europa incluyendo, no hay que olvidarlo, a un montón de franceses contrarios al emperador. El episodio de Waterloo lo mismo pudo pillar a cualquier francés en uno u otro bando y bien pudiera haberse parafraseado entonces aquello que luego acuñara Machado para las desgracias de este lado de los pirineos.

Francesito que vienes
al mundo te guarde Dios
Una de las dos Francias
ha de helarte el corazón.

En estas circunstancias, se juntaron en Waterloo (a menudo se obvia este dato) casi dos "aliados" por cada bonapartista, lo que a mi juicio (recalco que es solo mi opinión) convierte la victoria de Wellington, más que en brillante como a menudo se la trata, en una simple consecuencia lógica de las matemáticas; y la derrota de Napoleón en algo que yo al menos nunca calificaría de humillante o denigrante. Es en todo caso, solamente mi opinión subjetiva a la vista de los hechos objetivos (y os aseguro, lo creais o no, que el pequeñajo corso no es precisamente santo de mi devoción).

Habiéndome quedado a gusto con este "arrebato nacionalista" (nuevamente disculpas) fruto de haber recibido la Historia directamente de la escuela positivista reinante en el siglo XX incluso en Francia (donde otras tendencias historicistas nacieron y florecieron al margen del común de las gentes) pienso sobre el asunto que nos ocupa que, si bien todo el mundo tiene derecho a conmemorar lo que le parezca (obviamente), la cuestión es que viviendo en comunidad (Unión Europea la llamamos ahora mientras dificilmente intentamos construirla) se requiere siempre un poco de "sociabilidad".

En las cosas comunes a todos los de la Unión (me parece de una lógica de cajón) debería evitarse siempre por puro sentido común andar conmemorando o celebrando (que no recordando) algún tiempo pasado (casi seguro peor diga Don Jorge lo que diga) en el que anduvimos cortándonos el cuello los unos a los otros; sobre todo en un momento coyuntural tan delicado como el actual en el que los fantasmas del pasado adquieren intensa luminosidad a la tétricra sombra de la Crisis.

Porque al fin y al cabo, podrán los belgas o quien sea celebrar en su casa lo que quieran; pero ¿cuesta tanto tener un poquito de tacto en algo que luego vamos a usar todos?. Vamos, vamos ... es seguro que tanto belgas, como franceses o españoles tenemos  más que de sobra gentes y hechos de autocomplaciencia nacional tanto o más brillantes e infinitamente más amables de recordar en una moneda común, sin necesidad de andar tocándole las pelotas a nadie.

Mirad que así se empieza ...y a poco que nos descuidemos acabamos otra vez en Waterloo

Saludos.

Granada escribió:

Por cierto deberíamos hacer los españoles una conmemorativa de la batalla de Bailén.

con la imagen de Don Jose de San Martin,uno de los artifices de esa batalla

ago1989 escribió:

Y una en recuerdo a todos los muertos de la Guerra Civil del '36.

Ya no hablo de bando Republicano o Nacional, por que al final, no fue acaso guerra de hermano contra hermano... (En el caso de mi familia literal).

por supuesto,pero eso es inviable,ya que todavia hay mucho rencor ,a lo mejor demtro de 100 años,cuando no haya descendientes directos

levassor escribió:

A todo el mundo (expresión usada para englobar a la Humanidad en su totalidad, desde españoles a papuoneoguineanos) que tenga un mínimo de sentido nacional le agrada rememorar los buenos momentos de su pais y encuentra desagradable que le anden recordando pasadas miserias históricas. A los franceses, que al fin y a la postre también somos seres humanos y por tanto experimentamos las mismas reacciones básicas que en cualquier otra "tribu" o latitud, también nos pasa.

Como, en efecto y a pesar de todo, la batalla de Waterloo no es tratada en el sentimiento colectivo francés como uno de nuestros mejores momentos, no me resisto antes de dar mi opinión sobre el asunto en cuestión, a hacer alguna precisión al comentario de Moski sobre la batalla (a título de opinión, claro está. Por favor perdonadme. Son cosas del nacionalismo. Sé que no tengo que explicaroslo a vosotros los españoles porque gracias al milagro de la doble nacionalidad yo también lo soy ).

En el periodo que conocemos como "los 100 días", el último estertor del imperio napoleónico tuvo que hacer frente (él mismo se lo había buscado, es verdad) a prácticamente toda Europa incluyendo, no hay que olvidarlo, a un montón de franceses contrarios al emperador. El episodio de Waterloo lo mismo pudo pillar a cualquier francés en uno u otro bando y bien pudiera haberse parafraseado entonces aquello que luego acuñara Machado para las desgracias de este lado de los pirineos.

Francesito que vienes
al mundo te guarde Dios
Una de las dos Francias
ha de helarte el corazón.

En estas circunstancias, se juntaron en Waterloo (a menudo se obvia este dato) casi dos "aliados" por cada bonapartista, lo que a mi juicio (recalco que es solo mi opinión) convierte la victoria de Wellington, más que en brillante como a menudo se la trata, en una simple consecuencia lógica de las matemáticas; y la derrota de Napoleón en algo que yo al menos nunca calificaría de humillante o denigrante. Es en todo caso, solamente mi opinión subjetiva a la vista de los hechos objetivos (y os aseguro, lo creais o no, que el pequeñajo corso no es precisamente santo de mi devoción).

Habiéndome quedado a gusto con este "arrebato nacionalista" (nuevamente disculpas) fruto de haber recibido la Historia directamente de la escuela positivista reinante en el siglo XX incluso en Francia (donde otras tendencias historicistas nacieron y florecieron al margen del común de las gentes) pienso sobre el asunto que nos ocupa que, si bien todo el mundo tiene derecho a conmemorar lo que le parezca (obviamente), la cuestión es que viviendo en comunidad (Unión Europea la llamamos ahora mientras dificilmente intentamos construirla) se requiere siempre un poco de "sociabilidad".

En las cosas comunes a todos los de la Unión (me parece de una lógica de cajón) debería evitarse siempre por puro sentido común andar conmemorando o celebrando (que no recordando) algún tiempo pasado (casi seguro peor diga Don Jorge lo que diga) en el que anduvimos cortándonos el cuello los unos a los otros; sobre todo en un momento coyuntural tan delicado como el actual en el que los fantasmas del pasado adquieren intensa luminosidad a la tétricra sombra de la Crisis.

Porque al fin y al cabo, podrán los belgas o quien sea celebrar en su casa lo que quieran; pero ¿cuesta tanto tener un poquito de tacto en algo que luego vamos a usar todos?. Vamos, vamos ... es seguro que tanto belgas, como franceses o españoles tenemos  más que de sobra gentes y hechos de autocomplaciencia nacional tanto o más brillantes e infinitamente más amables de recordar en una moneda común, sin necesidad de andar tocándole las pelotas a nadie.

Mirad que así se empieza ...y a poco que nos descuidemos acabamos otra vez en Waterloo    

Saludos.

Magnífico y "suave" alegato. Y esa franconización de nuestro querido Machado, muy buena.