Por suerte o por desgracia conozco este tema y aunque no he entrado nunca en el "Silo", sí conozco a gente que lo ha hecho por motivos de trabajo y lo que cuentan no es nada positivo. Parece ser que allí entran todos los materiales procedentes de excavaciones arqueológicas en la provincia de Córdoba, incluso de otras provincias limítrofes, y que buena parte de estos materiales se encuentran en condiciones que dejan mucho que desear, siendo imposible su acceso al público o a los investigadores, incluso su identificación en muchos casos.
El Museo Arqueológico de Córdoba está saturado y hace bastantes años que no se expone nada "nuevo" salvo que sea una pieza muy excepcional y mediática, quedando los materiales arqueológicos que van apareciendo relegados al "Silo".
Todo esto ocurre al mismo tiempo que buena parte de los museos locales de la provincia se quejan de que este patrimonio se extrae de sus términos municipales para ser almacenado de esa manera por la Junta de Andalucia, cuando estos museos tienen condiciones y medios adecuados para tener esos mismos materiales perfectamente expuestos al público, bien conservados y en su lugar de origen, que es lo más lógico.
Si la Junta de Andalucía mostrase un poco más de comprensión con estos museos locales se podrían resolver dos problemas: las piezas permanecerían en sus lugares de origen, estarían expuestas y accesibles por el público, y al mismo tiempo se quitarían el problema de la falta de espacio para almacenarlas. ¿Por qué no lo hacen? Pues porque después de 30 años de dejadez y mala gestión de la Junta resulta imposible saber qué es cada cosa y corren el riesgo de que algún museo o ayuntamiento reclame una pieza concreta y... ¡oh sorpresa!, no esté donde debería estar o se haya perdido, con el consiguiente escándalo (ya se han visto capiteles o vigas que se pensaban almacenadas en subastas en el extranjero). Así que prefieren seguir tapando el tema, manteniendo el secretismo e impidiendo que se sepa lo que hay allí y en qué condiciones.
Una pena.