Buenaaaaaaaaaaaaaas.
Hoy os quiero mostrar esta lentejilla de mi colección:
EMPERADOR: Graciano
VALOR: AE4
AÑO: 378 - 383 d C.
DIAMETRO: 15 mm.
PESO: 1,71 gr.
METAL: Cobre
CECA: Siscia 2ª oficina
REFERENCIA: RIC 31a
RAREZA: S (Escasa)
ANV.: Busto con manto y coraza y con diadema perlada, mirando a dch. del emperador. Alrededor leyenda: DN GRATIA-NVS PF AVG
REV.: VOT XV MVLT XX dentro de corona de laurel. En exergo: BSISC
Y con un poco de ayuda de la wikipedia, vamos a conocer la vida de este emperador:
Flavius Gracianus Augustus (¿abril, mayo? de 359 - 25 de agosto de 383), conocido como Graciano o Graciano el Joven para diferenciarlo de su abuelo Graciano el Viejo, fue emperador de Occidente entre 375 y 383.
Él es importante porque favoreció claramente la religión cristiana contra el paganismo, rechazando los tradicionales atributos paganos de los emperadores y quitando el Altar de la Victoria del senado.
Era hijo del emperador Valentiniano I y la primera esposa de éste, Marina Severa, nació en la ciudad de Sirmium (hoy Sremska Mitrovica, Serbia), en la entonces provincia romana de Panonia.
El 4 de agosto de 367 fue proclamado Augusto por su padre. A la muerte de Valentiniano (17 de noviembre de 375), las tropas destacadas en Panonia proclamaron emperador a su hermano pequeño Valentiniano, que entonces era sólo un bebé. Valentiniano era hermanastro de Graciano, nacido de Justina, viuda de Magnencio y segunda esposa de Valentiniano I.
Graciano aprovechó la oportunidad que se le brindaba; se reservó para sí la administración de las provincias galas, mientras que puso Italia, Iliria y África bajo el mando de Valentiniano y su madre, los cuales establecieron su residencia en Milán. La división, no obstante, era meramente nominal y la autoridad real quedó por completo en manos de Graciano.
El Imperio romano de Oriente estaba bajo el dominio de su tío Valente. En mayo de 378, Graciano derrotó completamente a los lentienses, la tribu más austral de los alamanes, en la Batalla de Argentovaria, cerca de la actual Colmar. Ese mismo año, Valente encontró la muerte en la batalla de Adrianópolis el 9 de agosto, esta derrota fue el mayor desastre militar romano desde Cannas, y con peores consecuencias, pues los godos, que habían entrado en el imperio huyendo de los hunos y provocando una catástrofe demográfica no volvieron a salir, siendo el primer pueblo germano que se asentó dentro del imperio. Valente anteriormente había rechazado esperar a Graciano y a su ejército para combatir juntos contra los godos; dos tercios del ejército romano oriental cayó en la batalla.
El gobierno del Imperio de Oriente quedó en poder de Graciano, y una de sus decisiones más relevantes, pues iba a significar la conquista del estado por los católicos, fue proponer al general hispano Flavio Teodosio el gobierno de la parte oriental para enfrentarse al caos tras la invasión de los godos y después de la aplastante derrota. Teodosio y Graciano colaboraron para enfrentarse al problema germánico y compitieron por atraerse el apoyo de los cristianos que reivindicaban los acuerdos del Concilio de Nicea de la época de Constantino y que aspiraban a que el Cristianismo fuera "católico" (en griego, universal).
Teodosio fue coronado emperador de Oriente el 19 de enero de 379. Graciano fue degollado por orden de Máximo que dio un golpe de estado y usurpó el imperio. La revuelta contra Graciano la encabezó este Máximo que hemos nombrado. Era un general hispano pariente de Teodosio llamado Magno Clemente Máximo Comes Britanniorum aprovechando sus victorias en Britania frente a los pictos, invadió la Galia con un gran ejército. Graciano, que esperaba hacerle frente en París, fue traicionado por sus tropas tras cinco días de escaramuzas y se vio obligado a huir. Sin embargo, fue alcanzado en Lyon. Allí fue entregado por el gobernador de la ciudad a Andragatio, uno de los generales de Máximo y asesinado el 25 de agosto de 383. Para otros historiadores Graciano no fue decisivo, sino que las cosas se impusieron con la fuerza de los nuevos tiempos.
Legado
El reinado de Graciano es una época importante en la historia eclesiástica, pues durante este periodo el Cristianismo se convirtió por primera vez en la religión dominante en todo el imperio.
Bajo la influencia de Ambrosio, Graciano prohibió las ceremonias paganas en Roma; se negó a llevar el título de Pontifex Maximus por considerarlo incompatible con su Cristianismo; retiró el Altar de la Victoria de la Casa Senatorial en Roma, a pesar de las protestas de los miembros paganos del Senado, y confiscó sus rentas; prohibió las donaciones de propiedades materiales a las Vestales; y abolió otros privilegios que poseían los sacerdotes y sacerdotisas paganos.
Graciano también publicó un decreto por el que todos sus súbditos debían profesar la fe de los obispos de Roma y de Alejandría (es decir, la fe de Nicea). El movimiento fue empujado principalmente en la creencia de poder acabar así con el Arrianismo, pero sectas disidentes más pequeñas, tales como los macedonios, también fueron prohibidas.
Un saludo.