¿Alguien se lo ha planteado alguna vez?...

Yo y me imagino que casi todos, llevo un excel donde pone el precio de adquisición de cada pieza para que mis herederos sepa por donde fueron los tiros de su valor, de todos modos puesto que toda mi coleccion es de plata/oro y es más su valor en metal que el numismático en el peor de los casos la pérdida no sería mayor 30%.

Pienso que siempre y cuando no haga falta economicamente hablando lo mejor es disfrutar la colecció hasta que no estemos, de hecho pienso que cuando sea viejete y este jubilado será cuando mas podre disfrutarla por que tendré más tiempo libre.

britannia escribió:

Pienso que siempre y cuando no haga falta economicamente hablando lo mejor es disfrutar la colecció hasta que no estemos, de hecho pienso que cuando sea viejete y este jubilado será cuando mas podre disfrutarla por que tendré más tiempo libre.

En este párrafo se concentra todo mi pensamiento con respecto al futuro de mi colección.


Un saludo

Por cierto, tengo que reconocer que mi percepción sobre mi colección ha variado a medida que he ido adquiriendo y disfrutando más de las monedas y la idea de coleccionar mirando también la inversión ha ido dejando paso al puro disfrute de la numismática, sin pensar en inversiones ni nada por el estilo. Con lo que, si en un futuro no hay necesidad de dinero, probablemente, nunca venda mi colección. Además, esta nueva forma de ver la numismática también ha hecho que baje un poco el listón de calidad y, por tanto, del gasto. Ahora con monedas más económicas, aunque en menor conservación, disfruto igual que si fuesen las mejores. La ventaja es que tengo más dinero para gastar en otras actividades.



Un saludo

Yo empecé mi colección desde muy pequeño adquiriendo una pequeña colección familiar, con diez años pedí por mi cumpleaños un lote de sellos conmemorativos. Aún soy un joven estudiante y mi colección se va ampliando poco a poco pero espero no llegar a venderla. En mi grupo de amigos y hasta en mi barrio soy un poco "bicho raro" por coleccionar monedas, sellos... para mí cada moneda de diferente época es como viajar al pasado y alguna gente me regala monedas porque sabe que las sé valorar, por eso también algunas monedas tienen un valor sentimental. Si algún día tuviese que deshacerme de ellas, se las daría a alguien que las valorase de verdad y que no las vendiese.

Yo en alguna ocasión lo he pensado, pero ni he querido pararme a dar demasiadas vueltas al asunto. He leído comentarios que me han parecido buenos, como el llevarlo perfectamente organizado, venderlo... De momento yo la mantengo, cuando pasen los años ya iré viendo lo que hago

Muy interesante el hilo.
Yo llevo intermitentemente en esta aficion desde los 12, y desde luego si tengo la suerte de tener una independencia economica en mi vejez me gustaria disfrutar de la coleccion hasta el ultimo suspiro. No tengo herederos ni nadie a quien le interese este tipo de aficion. Tengo una tabla de excel donde estan todas las monedas con sus precios y tengo instrucciones por escrito a quien venga detras para que no malvenda las monedas como oro y plata al peso. Al fin y al cabo nos estamos muriendo cada dia y este puede ser el ultimo, asi que la prevencion es siempre una idea. Por otro lado una vez cruzada la laguna estigia y pagado el ultimo obolo no creo que nada me importe demasiado. Eso si, lo de llevar un columnario al otro barrio para el pago a Caronte me parece simpatico.

Yo a mi hijo de 3 años le voy familiarizando con las monedas desde ya. Le dejo jugar con la caja de repetidas y le enseño los animalitos y demás motivos que aparecen en las monedas. Creo que si poco a poco va conociendo el mundillo, quizás de mayor sepa valorarlo y le guste el tema.
Os puedo decir que la cosa promete. Ayer caminando por la calle se encontró un euro y vino enseguida a darmelo para mi colección! Al final nos lo gastamos en chuches

mi hijo,dice,que cuando vendemos las monedas,para irnos de viaje y comprarnos un coche,el coche lo compramos en agosto,sin vender las monedas,el viaje sin los perros no se viene,ea.
con esto digo que conmigo creo que se terminara la colecion,de mis monedas..
darlas a un museo,no quiero que un politico se haga unas fotos con mis monedas.
no sabemos que pasara cuando no estemos aqui,pero algo pasara...

Un poco viejo este tema, pero bueno, yo he pasado por eso ya. Tenía una excelente colección de armas antiguas, desde hace unos 20 años, y me había planteado eso mismo, pensaba donarlas a un museo cuando me quedara poco, pero por nuevas normativas y otras cuestiones, en los últimos 3 años la he liquidado casi en su totalidad, pagando deudas, invirtiendo en mi salud y comprando otros objetos.

Tengo otras cosas e valor, que haré lo mismo antes de irme al otro barrio.

Las cosas heredadas de mi familia, abuelos, bisabuelos, etc, para mis sobrinos.

Así es la vida, son objetos, llevan aquí más tiempo que nosotros, y solo somos sus custodios, no sus dueños.

Aunque es un hilo muy viejo, cómo estamos pensando en la perpetuidad de las colecciones, vamos a perpetuar el hilo también.
Yo acabo de empezar la colección de monedas precisamente por hacerlo junto a mi niño de 2 años y la idea es ir a comprarlas con él. Si más adelante no se engancha pues seguirá el papá sólo y ya veremos qué pasa.
Me preocupa más mi enorme biblioteca, la cual no estoy dispuesto a renunciar y mi mujer ya se ha resignado. Espero que mi hijo la adore porque una biblioteca no tiene tan buena salida como una colección de monedas, y menos en estos tiempos. Fernando Sánchez Dragó tiene cientos de miles de libros y aquí cuenta la idea de qué hacer con su biblioteca:

Ciclo La Biblioteca de Fernando Sánchez Dragó - En youtube (Aún no me dejan poner enlaces)

Seguro que os da ideas.

Fíjate, no me había parado a leer este hilo. Pues nada, aunque tenga sus años, si está como postit es para que se siga opinando, así que ahí voy.

Hoy por hoy, ninguno de mis hijos tiene especial interés en ella, el mayor antes sí, tiene una pequeña colección y me acompañó a la plaza mayor alguna vez, pero ya está en la edad en que esas cosas no le interesan, y la pequeña, pues aún es muy pequeña, cuando sea más mayor pues igual le despierta el interés.

Así que si ninguno de los dos la quiere, dejaré dispuesto en mi testamento que mi colección se conserve en el mausoleo que mandaré que se construya en mi honor, que también servirá como museo dedicado a mi persona. Ahí será expuesta junto a los otros objetos que más significaron para mí en mi vida, y que las futuras generaciones que acudan a rendirme homenaje y a hacerme ofrendas la puedan disfrutar como lo hice yo en su día.

TirantLoBlanc escribió:

...la puedan disfrutar como lo hice yo en su día.

Para disfrutarla como tú lo has hecho, sería necesario poder tocarlas, clasificarlas... vivirlas. Y eso nadie lo volverá a hacer, al menos con todas juntas. Vendidas, sí que volverían a ser disfrutadas como tú lo has hecho.

Salud.

Dejar el coleccionismo... ¿Quién sabe?

Conozco un caso de un chaval (de unos treinta y pocos años) que tenia una colección muy bonita de monedas mundiales. Todas ellas en un perfecto Sin Circular, se dejaba un dineral todos los domingos en el mercadillo, tenía además unos cartoncillos en los que más que informar tenia fichas, diferentes colores para cada identificación, eran tremendos!!
Pero, atropelló sin querer, por supuesto,  a una señora mayor en un paso de peatones y le toco pagar una indemnización a la familia. Ni seguro, ni bancos le avalaron y tuvo que recurrir a su preciosa colección.
La vendió entera, jamás ha vuelto a comprar una moneda... ¡¡Ojala en un futuro recupere la idea!!

Por eso, mientras pueda seguiré coleccionando, nunca nadie sabe lo que mañana te va a ocurrir!!

Interesante reflote, no lo había leído.

Yo soy de los que piensa que la colección es para disfrutarla yo, en cierta manera me da hasta igual lo que hagan con ella cuando yo ya no lo vea. Venderla durante mi jubilación, si llego, ni de coña creo que es cuando más la podré disfrutar, si hasta sueño con el hueco que dejarán mis hijas, cuando se emancipen, para poder ampliar mi "espacio".
Mi hija mayor si parece que el coleccionismo le guste,.desde pequeña sino son cromos , minerales, monedas etc todo lo que pilla pero como digo no me preocupa y no la empujo hacia el coleccionismo asi que si ella quiere podrá seguirla sino por lo menos ella sabrá lo que hay que hacer con ella, es la que muchas veces me acompaña.

Granada escribió:

Para disfrutarla como tú lo has hecho, sería necesario poder tocarlas, clasificarlas... vivirlas. Y eso nadie lo volverá a hacer, al menos con todas juntas. Vendidas, sí que volverían a ser disfrutadas como tú lo has hecho

Pues para que al menos se hagan una idea de cómo las disfruté. Porque venderla es una opción que no contemplo, ni yo ni quien la herede. Ya dejaré estipulado que la condición para heredarla sea no venderla (salvo caso de fuerza mayor, claro).

Lo de venderla no me referia a ti, sino a los herederos. Si consigues que la conserven, será un éxito.

Yo, lo de que será / hacer con la colección cuando yo no esté me lo planteo a veces.
Supongo que si no intuyo una afición clara entre mis hijas, expurgaré la colección y dividiré lo más representativo y que merezca la pena para dárselo a mis hijas. Junto con una nota sobre cómo venderlas.
Entre las monedas históricas, dejaré algunas bullion por si les dá por vender algunas, que empiecen por estas y que las históricas se queden en la familia por si luego les dá por retomarlo.
De momento les estoy iniciando en este mundillo para ver si se aficionan y aprenden historia, aunque luego con las hormonas imagino que lo dejarán como me pasó a mi.
La iniciación lo están cogiendo con ganas. Lo único malo, es que ya han dicho a todas las amiguitas del cole y su profe que papá "tiene una colección de moneditas en casa" ; lo cual me ha sentado como una patada en los...

Aprendizdetodo escribió:

Lo único malo, es que ya han dicho a todas las amiguitas del cole y su profe que papá "tiene una colección de moneditas en casa" ; lo cual me ha sentado como una patada en los...

Lo puedo imaginar, yo les he dicho a los míos más de una vez que no les digan a nadie lo que tengo, que luego pasa lo que pasa...

Luego descubres que no eres el único. En una ocasión me dijo mi señora: "esto te interesa, la madre de ***** colecciona y vende monedas". Y lo primero que pensé fue: pedazo de friki

Por desgracia, este año me ha tocado enfrentarme a la muerte de una manera muy cercana y estoy aprendiendo el significado del luto.

Entre esas lecciones está la que da título a este post. Además, debo decir que siempre he sido una persona que le da mucho valor al legado familiar; hasta el punto que cuando diseñé mi escudo heráldico me propuse que mi motto fuese: "de las olas del pasado construiré el futuro". Tengo pendiente traducirlo al latín, lengua que desconozco...

Pero, al caso; desde mi perspectiva lo fácil será disfrutar mi colección hasta el final. No concibo venderla en ningún momento, mientras las circunstancias no aprieten. Pero, además, como desconozco cuándo será mi final no podría pensar: "con x años, empezaré a venderla" Igual me quedo a medio camino de x o a medio camino de terminar de venderla.

Este año, también, he sido padre primerizo, con lo que esta obsesión por el "legado" se me está acentuando. ¿Me gustaría transmitirle mi interés en la numismática? Sí, pero será una decisión suya que es imposible forzar. Sin embargo, pienso que es posible que algún día llegue a abuelo; es decir, que el "legado" no se termina ni en mí ni en mi hijo.

Siendo así, y si él decide que nada quiere ver con las monedas, sí que me gustaría darle tiempo al tiempo y ver que opinaría su hijo. Al final, coleccionamos monedas que frecuentemente pasan del siglo (también milenio en mi caso), y ahí han seguido, pasando de mano en mano.

Por ello, entre las opciones que me planteo, es la de hacer un fideicomiso con mi colección de manera que llegue entera, al menos, hasta mi segunda generación. Problema, que en ese momento será pública con todo lo que ello implica fiscalmente... así que igual lo que hago es, además de un listado de su valor para que no las malvendan, es un "documento de voluntades" junto con el testamento en el que explicarle a esas generaciones venideras de propia mano qué me motivó coleccionar estas monedas y que me proporcionaron. Ya no será solamente un montón de metal acuñado, habrá un documento escrito por un viejo chocho en el que podrán conocerme.

Al menos, a mí me hubiera encantado encontrarme con un diario personal de mis ancestros.

Pues yo, que soy un joven de 55 añitos y con dos hijas pequeñas (8 y 10 años) pues me lo he pensado alguna vez, y ya he vendido una pequeña parte de mi colección (billetes extranjeros) pero más que nada porque no me interesan.
Yo, tanto a mi mujer como a mis hijas les voy diciendo lo que tiene cierto valor, y si la palmo, que se vayan a una numismática y que la vendan o lo que quieran, total no me voy a enterar.
Como si quieren vender mi colección de álbumes de cromos antiguos, o la biblioteca que tengo.
Conozco un caso de un señor de 80 años que ha vendido su magnifica colección de billetes españoles, es una gran eminencia en la notafilia, pero tanto a sus hijos como a sus nietos no les interesa, y a preferido venderlo. Para los gustos, los colores.

Después de 40 años vuelvo a coleccionar, lo hago porque me gusta imaginar lo vivido por una moneda desde que fue acuñada hasta hoy. Si mis descendientes no tienen este sentimiento que las vendan, alguien lo agradecerá.
Si no se vendieran colecciones no podríamos ampliar las nuestras y seguir disfrutando.

Yo no colecciono, apilo. Tengo empezadas algunas colecciones de bullions, pero con la misma finalidad inversora. Empecé teniendo ya asumido que la amortización del contenido del cofre la harán mis hijos, por lo que no me planteo si vender o no vender. De hecho, ni siquiera contemplo las piezas del tesoro más que el tiempo que tardo en desempaquetar lo que pido, hacer una fotillo para publicarla aquí cuando son onzas más especiales y sanseacabó. Lo que entra en el cofre queda sumido en las tinieblas SINE DIE.

Por lo tanto, que se coman el coco ellos cuando llegue el momento. Yo bastante estoy haciendo con apilarles la jubilación, qué carajo. Si Vd. no tiene hijos a quien legar la colección aunque sea por su valor crematístico, pues véndalo todo cuando vea que le puede sacar más pasta. Total, en cualquier momento nos puede dar un chungo, palmarla ipso facto y los que se quedan aquí son los que disfrutarán del esfuerzo.

Interesante hilo es este .
Os daré mi opinión.
Todo depende del tipo de colección que poseas .
Y de si tienes algún ser querido al que donársela y que le guste para poder continuarla.

En mi caso poco valor económico tienen mis colecciones, tampoco tengo hijos pero sí una sobrina a la que le regale unos sellos hace un tiempo .
Puede que le guste puede que no ya veremos.

Si le gusta pues todo para ella si no pues al mejor postor .

Pero eso no quita que dependiendo el tipo de colección creo que tienes que tener cosas en cuenta y más si tiene un fuerte valor económico.

En este caso puede optar por vender y disfrutarlo , dejárselo a tus seres queridos explicándoles bien lo que tienen que hacer si quieren vender.

Si tienes una super colección de museo pues también puedes pensar en donarla a un museo .
Y que todo el mundo pueda disfrutarla .

Yo no tengo esos problemas el valor es más sentimental ya que mi abuelo me dio su colección de sellos .

Saludos .

Jamás he coleccionado para vender.
Y mucho más que trasladar la colección de generación en generación,
lo que me gustaría verdaderamente es transmitir la ilusión
por coleccionar - y por las ganas de aprender.

Ale, y me ha salido en verso casi sin querer.

Estupendo hilo, magnífico reflote, y un poco angustioso ver las edades centenarias de algunos compañeros.
El tiempo ha pasado para todos y también para sus ideas, algunas seguirán, otras habrán mudado.

Saludos

Es normal pensarlo: en mi caso, pienso más en disfrutar que otra cosa. No soy coleccionista al uso. Más bien voy haciéndome con monedas nuevas que me llaman la atención por temática y/o diseño. En mi entorno no hay mucha gente que se dedique a coleccionar monedas, y la curiosidad me viene por mi abuelo y por mi padre. Cuando llegue el momento de empezar a soltar lastre, veré si voy regalando o hasta vendiendo alguna cosilla