Este articulo contiene un apretado resumen de los orígenes de una de las zonas de influencia helénica mas oriental que haya existido: la Bactriana, haciendo énfasis en el fabuloso sincretismo cultural que se forma y como se plasmó en la numismática, principal fuente de conocimiento para esta civilización tan particular, que sigue siendo tan rica, inexplorada y peligrosa como en la antigüedad.
Afrodita de Bactria, ornamento del tesoro de Tillya –Tepe, Museo Nacional de Afganistán.
El inicio nos remonta a los pueblos iranios que a su vez, descienden de las antiguas tribus de la meseta iraní, se distribuyen en el Cáucaso, Medio Oriente, Asia central y el subcontinente Indio. Pero la influencia irania en términos lingüísticos es bastante más amplia. En la antigüedad entre los pueblos iranios occidentales destacaron los Medos y por sobre todos los Persas, entre los iranios orientales los Escitas, Sogdianos, Aracosios, Gandaros, Partos y los que motivan el artículo, los Bactrianos cuyas ciudades y cecas (Balkh, Taxila, Panjshir, Merv, etc.) nos legaron un arte formidable.
Esta región limitaba al norte con el rio Oxus, y los territorios Sogdianos y Escitas; al sureste con el Hindu Kush y al oeste con los territorios Drangianos; fue posesión de al menos dos de los imperios más extensos territorialmente hablando. Ocupo terrenos del imperio Media antes de ser anexionada por Ciro el grande a posesión Aqueménida y convertida en una importante y agitada satrapía. Uno de estos famosos sátrapas, Bessos, quien junto al Sátrapa de Aracosia y Drangiana, Barsaentes y el de Aria, Satibarzanes, deciden no apoyar a Darío III tras su derrota en Gaugamela y este es apresado mientras se dirigía a Bactria, paradójicamente donde pensaba estar protegido de las tropas macedónicas. Bessos, ni nadie en realidad, pudo mensurar adecuadamente las ambiciones de Alejandro y no contó con que se quedaría en Asia y para siempre, por lo que decidió ejecutar al emperador, suponiendo que Alejandro no estaría interesado en un terreno tan lejano. Su error le costó la invasión de su satrapía, sus orejas y su nariz; todo esto antes de ser entregado al hermano de Darío para completar su tortura.
Doble Shekel con Arquero indio en el anverso y elefante en el reverso, atribuido a la ceca de Taxila y circulante en la época de la conquista macedónica de Asia.
Este decadracma de Alejandro (336-323 a. C.) conmemora la victoria sobre el rey Poros en Hidaspes, el artista refleja un momento histórico en el que no se muestra al derrotado en posición humillante sino más bien se le reconoce su valentía en la batalla a través de los guerreros Mohut defendiendo el ataque de la sarissa de Alejandro y Bucéfalo hecho que no es casual ya que sería su aliado sátrapa tras la batalla. En el reverso Alejandro en traje militar portando una sarissa y un rayo, síntesis preciosa del guerrero y del dios que coexistían en él, mientras es coronado por una Niké.
Después de la muerte de Alejandro y las guerras de los diadocos, el territorio siguió siendo satrapía, ahora del imperio Seleucida (305 a.C.). Este sometimiento no duró mucho, desde su mismo origen Seleuco debió pactar la entrega de los territorios orientales al Hindu Kush a Chandragupta, fundador del Imperio Mauryano, a cambio de 500 elefantes (Mitchiner) y matrimonios cruzados entre ambas dinastías.
Didradracma de Sophites (305-294 a. C.) Bactria en la era pre seleucida, donde la influencia griega del tetradracma ateniense es evidente
Este tetradracma acuñado en Seleucia en el Tigris (312-281 a. C.), nos muestra a Zeus y en el reverso una cuadriga de elefantes dirigida por Atenea y el ancla seleucida arriba. En otro ejemplo del arte en Susa, Seleuco también en conmemoración de una victoria, acuña este segundo tetradracma en donde aparece con un casco de piel de pantera, orejas y cuernos de buey, este tipo aparecerá más adelante en los cascos de Eucrátides que conmemoran victorias y conquistas.
La lejanía de Seleucia y del poder central volvió a engendrar deseos independentistas que se consumaron bajo el gobierno seleucida de Antioco II Teos, con la rebelión de Diodoto I en el 255 a. C., fundador del reino GrecoBactriano. En este escenario se funden al menos otros dos acontecimientos potentes para el orden helénico, la rebelión en la satrapía de Partia por Andragoras y que termina en la fundación del imperio parto por Arsaces en el 238 a. C. y la victoria de los cónsules Cayo Atilio Regulo y Lucio Manlio Vulso sobre los cartagineses que junto con las incursiones seleucidas en el Egipto Ptolemaico obligaron a dirigir la atención hacia el oeste. Este nuevo orden separó definitivamente a Bactria de occidente (Partia de por medio) y empujo la influencia helénica hacia la India.
Este tetradracma acuñado en Balkh (Bactra) nos muestra a Diodoto I (256-239 a. C.)con Zeus en el reverso mientras era sátrapa seleucida, ver leyenda de reverso Antíoco Basileus, en el stater ya como usurpador de Bactria con su propio nombre.
La conquista de India fue desarrollada por Eutidemo quien arrebata el poder a Diodoto II y se enarbola como el organizador del reino, ya que tras soportar una derrota y un sitio de dos años, logro convencer a Antíoco III de reconocer su reino ante la amenaza común de las tribus Yue Zi, en especial de los Kushan (una de esas tribus) y de los partos, de deponer el sitio y terminar así la consolidación de este nuevo reino, a cambio de elefantes de guerra (nuevamente) y el matrimonio de Demetrio, hijo de Eutidemo con la hija de Antíoco . También las alegorías numismáticas sufren un cambio, el motivo diodótico de Zeus (Diodoto significa regalo de Zeus) es reemplazado por el eutidémico de Hercules , a su vez el de Demetrio al ganarse el honor de la conquista de territorios indios, ocupa en sus monedas el tocado de piel de elefante, al igual que Alejandro Magno (200-180 a. C.)
Aunque no hay claridad en el asunto, seria Demetrio II (175-170 a. C.)quien consolida la ocupación de la India, aprovechando el debilitamiento del imperio mauryano, e inicia la acuñación de las famosas piezas bilingües, en griego y brhami y posteriormente en griego y jaroshti.
En este periodo aparecen en forma contemporánea varios reyes bactrianos por lo que se postula que podrían ser sátrapas de distintos territorios o generales de igual rango: Agatocles y Pantaleón (190-180 a. C.), ambos bajo el mandato de un rey Demetrio II, en este periodo ocurre otro evento numismático muy interesante, las primeras acuñaciones de nickel de la historia, no se volvería a usar este metal sino hasta el siglo XIX.
En este panorama aparece la figura de Eucrátides (170-145 a. C.), quien derrota a la dinastía eutidémica y entrona a la última dinastía greco bactriana, la eucratidia, en ella además de aparecer los bustos dobles, se incorporan los dioscuros como alusión a la potente caballería bactriana y al consolidar su reino se agrega el apelativo de Megas (el Grande) un ejemplo de este arte excepcional es este tetradracma de busto heroico acuñado en Merv.
El gobernador de las mil ciudades, por la rápida y extensa conquista que logró, corona este periodo con una pieza conmemorativa de oro, la más grande del mundo antiguo con sus 169,2 grs de peso y 58 mm de diámetro que se conserva en el Cabinet des Médailles en Paris.
El reino grecobactriano propiamente tal se acaba con el sucesor de Eucratides, su hijo Heliocles (145-130 a. C.) quién asume el poder tras la muerte de su padre al ser arrollado por el carro de guerra de su propio hijo (Justin) aunque hay otros que culpan a Plato (¿145- 140 a. C.?) de esta acción y que éste a su vez, fue depuesto por el mencionado Heliocles, en venganza por la muerte de su padre.
Menandro (155-130 a. C.) se alza posteriormente como gran general y conquistador de la india, mientras que en el norte, tribus nómadas probablemente asios, pasianos, tocarios y sacaraulios, toman definitivamente el control del norte de la meseta afgana y relegan el último bastión griego hacia oriente, dando origen al reino indo griego, que ya es tema para otra ocasión.
Bibliografia:Polibio, Historia Universal, Ediciones Solar, 1965.
Mitchiner M, Indo-Greek and Indo-Scytian Coinage Volume I, Seaby, 1975
Pelegrín J, La moneda Grecobactriana e Indogriega, Revista Clio N° 23, 24, 25, 28, 2001-2002
Gardner P, The Coins of the Greek and Scytic Kings of Bactria and India in British Museum, 1886.
Cunningham A, Coins of Alexander's successors in the East, the Greeks of Indo-Scythians, 1969.
http://www.worldhistorymaps.com/http://www.acsearch.info/http://www.britishmuseum.org/default.aspxhttp://dbahispano.blogspot.com/2009/05/el-sueno-de-bactriana-los-ultimos.html
Índice 
Hoy a las 9:43 por 
