No hace mucho, el compañero
@Ric me sugiría que en lugar de poner el enlace a mi blog cuando pongo una entrada, copiara directamente el texto.
Venga, hoy me he animado y pongo una exposición de tres ¿billetes? que se utilizaron en Salamanca el día 6 de octubre de 2024.
Va por él y por
@caramanchada, que sé que le gustan los gorriones:
Imagen promocional de la 2ª feria de intercambio.El día 6 de octubre de 2024, la asociación de vecinos del barrio Garrido de Salamanca, “Garrido Contigo”, organizó la segunda edición de la feria de intercambio “No lo Tiro”.
La idea en teoría es buena. Se trata de que aquellas personas que deseen participar, lleven todos los objetos que tienen en casa y no necesitan con el objeto de evitar tirarlos a la basura con el consiguiente aumento de residuos, y darles una segunda vida cambiándolos por otras cosas que hayan llevado otras personas y nos puedan resultar útiles a nosotros.
La norma era fomentar el trueque, por lo tanto, estaban prohibidas las transacciones con dinero, es decir no estaba permitido comprar o vender, todos los tratos tenían que realizarse intercambiando productos.
La comunidad “No lo Tiro” es un grupo de Whatsapp en el que sus miembros se intercambian toda clase de enseres. También organizan mercadillos de intercambio y según su administrador, Andrés Hernández, en ocasiones se generan amistades. Tras el éxito de la primera feria, realizada el 26 de mayo de 2024, salió de nuevo a la calle con la colaboración de la asociación de vecinos Garrido Contigo.
Para poder realizar los intercambios, Andrés Hernández, diseñó unos billetes en colaboración con el artista Jesús Ángel Martín. Andrés le explicó la idea al dibujante, el nombre de la moneda, que se llamaría “félix”, y estaría dedicada a Félix Rodríguez de la Fuente y detalló los elementos principales que quería que apareciesen en cada billete. El resto del diseño fue fruto de la creatividad y talento de Jesús Ángel Martín.
La impresión se realizó en la empresa Artes Gráficas Monserrat regentada por Roberto Carbayo y se imprimieron alrededor de 300 unidades en total de todos los valores.
El funcionamiento del intercambio era sencillo. Una persona entregaba todo aquello que quería cambiar. Los responsables de “No lo Tiro” tasaban sus artículos en félix según su propio criterio (por ejemplo, una prenda de ropa o un libro valía 1 félix) y pagaban a la persona la cantidad que consideraban que valía todo aquello que llevaba. Con los billetes en la mano, cada participante podía comprar otras cosas que habían depositado anteriormente otros vecinos.
Para evitar cualquier tipo de especulación, los billetes no tienen conversión al euro. Hay tres tipos de billetes con valores de uno; cinco y diez félix. Todos ellos tienen en el anverso un personaje histórico y en el reverso un elemento de la naturaleza relacionado con Salamanca.
Conozcámoslos:
1 félix, anverso.El nombre de los billetes es un homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente que es además el protagonista del billete de 1 félix.
Andrés Hernández eligió a Félix Rodríguez de la Fuente por haber sido quizá el naturalista, más influyente de España. Inculcó en toda una generación unos profundos valores ambientales. Fue capaz de sensibilizar a la sociedad del momento a través de sus programas de televisión sobre la necesidad de conservar el medio ambiente. La imagen de fondo es un botón charro. Este fondo también se repite en el anverso de los demás billetes.
1 félix, reverso.En la otra cara figura un gorrión. Se trata de un pájaro muy común que se encuentra tanto en Salamanca como en otras ciudades del mundo, sin embargo, es también una llamada de atención hacia un ave que está sufriendo un alarmante declive: sus poblaciones en España se han reducido casi un 20 % desde 1998. Al fondo, una vista panorámica de la ciudad de Salamanca.
5 félix, anverso.El billete de 5 félix está dedicado al cantante y compositor de los Beatles, John Lennon. Además de cantante, destacó por su activismo político contra la Guerra de Vietnam, el Domingo sangriento de Irlanda del Norte y otras actividades en favor de la paz.
5 félix, reverso.Sobre un fondo azul en el que se reproduce el medallón de los Reyes Católicos tallado en la fachada de la Universidad de Salamanca, el reverso del billete de 5 félix está dedicado a la salamanquesa. Es un guiño al nombre de la ciudad. La salamanquesa es un pequeño reptil bastante común en la península ibérica, con frecuencia conviviendo con los seres humanos en casas y corrales de pueblos. No confundirlo con la salamandra, que es un anfibio.
10 félix, anverso.El ejemplar de 10 félix lo protagoniza Mahatma Gandhi por su movimiento de independencia de la India contra el Imperio Británico para lo que practicó la desobediencia civil no violenta.
Una vez conseguida la independencia, Gandhi trató de reformar la sociedad india, empezando por integrar las castas más bajas y desarrollar las zonas rurales. También destacó por su desaprobación de los conflictos religiosos que siguieron a la independencia de la India, defendiendo la convivencia entre hinduistas y musulmanes en el territorio indio.
10 félix, reverso.El elemento natural del billete de mayor valor es una encina, el árbol más representativo de la dehesa salmantina. De esta especie longeva, que puede llegar a vivir varios cientos de años, se aprovechan sus bellotas para alimentar al ganado y su madera para hacer un excelente carbón vegetal.
El diseñador insertó algunos detalles curiosos, como el valor en árabe o la Paloma de la Paz de Picasso en lugar de la bandera de Europa. Además, los billetes de euro llevan grabado en el anverso un pequeño código de números y letras, en el que se indica la ceca de fabricación, el número de plancha que lo ha impreso y la posición que ocupa el billete dentro de los pliegos que la plancha imprime. En el caso de los félix, este código ha sido sustituido por R2D2, C3PO, los nombres de los famosos robots de “La Guerra de las Galaxias”.
A un servidor le pareció que la iniciativa del intercambio a través de unos billetes podía resultar interesante y me desplacé a la plaza donde se realizó el evento. Llevé para intercambiar algo que había comprado recientemente, el perchero que pueden ver en la imagen inferior (sin el abrigo amarillo).
Podía haberlo vendido en Wallapop tranquilamente y obtener dinero en metálico, pero preferí llevarlo al mercadillo de intercambio. Me puse a la cola y cuando llegó mi turno, mi perchero no fue valorado, según mi humilde entender, acorde a lo que yo creía que valía.
Cuando le expliqué a la señora que me atendió lo que el perchero costaba en Ikea, (https://www.ikea.com/es/es/p/rigga-burro-ropa-blanco-50231630/), me ofreció más billetes y le dijo a su compañera que ese objeto quedaba apartado y que no se vendía.
Y no se vendió.
Realmente a mí me traía sin cuidado el destino del perchero, pero lo sentí por un caballero que me dijo estar interesado en él cuando estaba esperando en la cola.
Los periódicos locales calificaron al día siguiente la jornada de “éxitosa”. Y realmente lo fue, más de un centenar de personas se dieron cita para llevar sus cosas. Es de admirar el trabajo de voluntarios que no pararon un momento de colocar objetos, organizar cosas y atender al público.
Los organizadores por su parte obtuvieron al final de la mañana mercancías suficientes como para llenar un buen furgón, porque en realidad algo de intercambio si hubo, pero poco. Veamos qué pasó.
Fíjense en estas personas.
La cosa está clara. Los participantes entregábamos lo que nos estorbaba. Había de todo, pero en general lo que más abundaba era libros ajados, juguetes usados y ropa vieja.
Y con todo eso nos daban unos billetes con lo que se podía adquirir lo que habían dejado anteriormente otros usuarios, es decir, ropa ajada, libros usados y juguetes viejos.
Al final de la mañana, como no había nada atractivo para mí ni para otras personas con las que hablé, el intercambio que realizamos fue el de nuestras cosas usadas por unos bonitos papeles de colores.