1957, un buen año. Las Grandes Olvidadas XLIV.
Muy buenas chavales.
Hacía mucho tiempo que no cogía y me ponía a sacar imágenes a mis piezas, quizás por falta de tiempo, de ganas o simplemente que uno va pasando página y se centra en otros menesteres. Abrumado en muchas ocasiones por las pedazo de piezas que se van viendo por el foro mientras observa sus álbumes llenos de monedas que nadie quiere y, también asqueado de ver piezas de dos euros que valen siete millones y a sus usuarios tan ilusionados, hemos pasado de las pesetas del 47 negras y con mugre de 1.000€ a los 2€ de los siete millones...
Pero a todo esto en este mundo es muy difícil crear un grupo y, mucho más dentro de una comunidad que es tan pequeña y diversa a la vez. Con esto quiero decir que es difícil sentirse querido por gente que bien podrían ser mis padres, en cierto modo lo son, numismaticamente hablando, es difícil creer que siendo un payaso en más de una ocasión, hablando mal en casi todas mis intervenciones y siendo el que, entre comillas, no enseña las mejores monedas, he de reconocer que he conseguido crear un grupo, una pequeña familia me atrevería a decir, que quiero creer que me demuestran su amistad, su cariño y sobre todo su apoyo.
He de decir que por todo ello, me siento en la obligación de devolver ese cariño, esas muestras de fe en mí, siento que no puedo hablarles de las monedas que a ellos les gustan, siento no poder darles consejos sobre acuñaciones, tiradas y patinas de aquellas piezas grandes y hermosas, ni poderles aconsejarles sobre las subastas, sobre la historia de cada pieza, de cada rey y de cada ensayador. Solo puedo hacer lo mejor que se hacer, es decir, dedicarles hilos, tratar de sacarles una sonrisa, olvidarse por momentos de los malos ratos y hacerles saber que el cariño, la amistad, la fe y el apoyo es mutuo.
Sobre todo chavales, espero que estas monedas pequeñas, de metales no nobles, de inmensas tiradas y del cesto más caquero y barato del mercadillo dominical madrileño, os gusten y agraden. A veces simplemente lo mejor, es estar ahí.
Va por ustedes
@Julula y
@ManolosordoHalf Penny de Rhodesia and Nyasaland.
Poco se puede comentar de esta bella pieza de bronce, un diseño simple pero perfectamente adaptado al lugar con los motivos propios del territorio. Quizás Bernard Sindall no sea Sir Kruger Gray, hasta hay estamos todos de acuerdo, pero sinceramente en estas piezas lleno ese espacio y cumplió a la perfección con la tradición de monedas simples, sencillas y bellas a la vez. Acuñada por la Royal Mint de Londres, pesa 3,02 gramos, tiene un diámetro de 21 milímetros y su tirada fue de 1.920.000 ejemplares.
Puede que observando el Parque Nacional de Kafue que es una reserva ubicada en la actual Zambia, es decir en aquellos años en Rhodesia del Norte y que fue establecido en el año 1950, se inspirase en la creación de las monedas de este vasto territorio africano, dado que el paque consiste en una inmensa meseta situada a lo largo de los límites del río del mismo nombre y es famoso por su abundante fauna, casi todos los animales viven en los límites del parque y allí se encuentran los hipopótamos, cebras, elefantes, leones y las jirafas. Jirafas enfrentadas a cada lado de la moneda que aparecen en el Half Penny que os enseño.
Resulta que este territorio es curioso y posee una historia muy interesante. Rhodesia, ya sabemos, ese territorio que recibió el nombre de un tal Rhodes, ese señor británico que soñó con una línea ferrocarril que fuese desde Ciudad del Cabo hasta El Cairo (joder hay unos poquitos kilómetros eeeeh) todo bajo poder británico. Bueno que me voy, que Rhodesia del Norte (actual Zambia), Rhodesia del Sur (actual Zimbabwe) y Nyasaland (actual Malawy) el 1 de agosto del año que nació nuestro maestro
@Gobierno Provisional (1953) se vieron obligados a unirse bajo una federación que tendría un único Gobernador General ante la reina Isabel II, aunque seguirían manteniendo sus respectivos estatutos coloniales.
Como os imagináis, la federación resultó un desastre, sobre todo por qué en aquellos años los sueños de independencia de una clase que había estudiado en las universidades de la metrópoli y con muchas ansias del poder (luego se demostró que muchas veces por las armas y la venta de sus minas, hombres, niños, campos etc) acabaron dando al traste con ella y, debido a ello, en tan solo un poco más de una década se disolvió y se crearon países nuevos.
Como curiosidad, la pieza se acuñó por ultima vez en el año 1964, una vez que la federación estaba disuelta. Y como soy un completista asqueroso de monedas Chapus y baratas, pues también os enseño la última pieza, así de regalo malo, de esos que nadie quiere pero que te tienes que comer por compromiso jejeje
1 Yen del año 32 de Hirohito. Japón. 1957 del calendario cristiano.
La guerra ha terminado hace ya, once años y pico han pasado. La recuperación económica del imperio va viento en popa, mucho que restaurar, mucho que pensar y mucho llorar han sido esos años de atrás. Pero lo importante es que el país vuelve a soñar y a veces, también a tener pesadillas. Pesadillas creadas a raíz del espanto provocado por los bombardeos acaecidos durante los últimos años de la guerra y sobre todo, el pánico nuclear vivido en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki a principios del mes de agosto de 1945. Una de esas pesadillas se vio claramente reflejada en la película de 1954, Japón bajo el terror del monstruo, nombre que recibió la película en la época aquí, en España, pero mundialmente conocida como Godzilla, un monstruo nacido de unos ensayos nucleares en la isla de Odo y que destruye todo lo que se le pone por delante con su rayo.
Pero los sueños son los que importan, en 1957 en varias ciudades japonesas se empezaban a construir inmensas torres de telecomunicación, sobre todo repetidores para la televisión. Una de ellas, quizás la más famosa de aquél año fue la de la ciudad de Sapporo, ciudad que albergaría también unos Juegos Olímpicos años más tarde.
Cartel original de la película de 1954
Otro síntoma de la buena marcha del pueblo, economia y cultura de Japón fue que en ese año, 1957, regresó al monetario el metal noble, la plata en concreto, con la moneda de 100 Yen y su magnífico diseño. Hacía casi veinte años que la plata había desaparecido, una cruel guerra donde millones perdieron la vida y, una muy dura posguerra donde se había transformado la mentalidad del país de arriba a abajo, incluida la figura del emperador, habían pasado desde la última vez que los japoneses pagaran sus compras con plata.
Pero claro, yo no la puedo enseñar la de plata, eso sería injusto con la moneda más pequeña (el mundo numismático es muy cruel con ella) de la época y que encontrar en una calidad de Sin Circular es bastante complejo en los primeros años, años que van desde su inicio en 1955 hasta más bien la de 1959, el resto es casi una obligación tenerla bien bonita, salvando la de 1968 y las pruebas, que son mucho más escasas y tan solo acuñadas al final del mandato de Hirohito. Además ya sabéis, estás piezas se acuñaron a millones y más millones cada año.
Esa rama de bambú, esos dos círculos, que moneda más común, tan vista, tan menospreciada, tan común que yo me atrevería a decir que esos 20 milímetros de diámetro y gramo de peso de aluminio, se ha convertido en un clásico moderno. Este año se acuñaron 492.000.000 de ejemplares en la ceca oficial del Japón.
1 Schilling de la República de Austria.
Solo deciros a modo de entrada breve, que en el mes de febrero de ese año, se celebró en Viena el Campeonato Europeo de Patinaje Artístico sobre Hielo. Al igual que pasó en la segunda edición de este torneo, en el año 1892, cuando Viena era la capital de un vasto imperio, donde en sus calles se reunían escritores, pintores, historiadores, filósofos, exiliados políticos y demás gente. Viena era por aquel entonces una de las grandes ciudades del viejo continente.
Eduard Engelmann ganó aquella edición, como os imagináis el austrohungaro ganó la única modalidad dado que la femenina en 1892 todavía no se realizaba. En 1957 ganaron Alain Glietti (Francia) en la modalidad masculina y la local Hanna Eigel en la femenina.
En lo que respecta a la moneda, se ve y se siente en las entrañas de ella, la necesidad vital de proporcionar a la población local de monetario para su día a día y a la vez se siente ese escaso peso del aluminio, metal de necesidad que, viniendo de donde venía Austria tras 1945, era completamente lógico.
Aún así, Michael Powolny realizó un diseño sobrio, sencillo y lleno de belleza y simbolismo a la vez. Por un lado observamos el escudo de la república, de nuevo Austria volvía a ser roja, blanca y roja como las palabras que pronunció el presidente de la república escasos años antes de que los alemanes invadieran "pacíficamente" el país. Y por el otro lado observamos un agricultor sembrando, sembrando esperanza, regeneración, sembrando ilusión, fe, sembrando futuro.
Una moneda de 25 milímetros de diámetro, de peso apenas dos gramos y que se realizó por última vez en la casa de la moneda de Viena este año. Se realizaron 28.649.000 ejemplares.
*** 1957 ***
Pues un bonito año, ¡Si señor!
¿Sabíais que Dwight Eisenhower presto juramento el 20 de enero para un segundo mandato como presidente de los Estados Unidos de América?
¿Sabíais que el 4 de febrero, Francia prohibió la participación de Argelia en la O.N.U.?
¿Sabíais que el 30 de mayo el Real Madrid gana a la Fiore 2 a 0 y se convierte en campeón de Europa de la 56-57?.... Como no te voy a querer!!, Como no te voy a querer!!, Si fuiste campeón de Europa una y otra vez!!
¿Sabíais que el 25 de julio, Tunez se convierte en República con Bourguiba como primer presidente?
¿Sabíais que el 21 de septiembre, Olav V se convierte en rey de Noruega a la muerte de su padre, Haakon VII?
¿Sabíais el 4 de octubre la URSS lanza el Sputnik 1, el primer satélite artificial en orbitar sobre la tierra?
Espero que os guste, esta nueva entrega de Olvidas..