Si en España hubiera una legislación parecida a la de Gran Bretaña tendríamos noticias así muy a menudo. Allí declaras lo encontrado y si el museo británico no ejerce derecho de compra te lo devuelve con una tasación y se reparte con el propietario del terreno a medias.
Aquí los que le gusta la afición legal están relegados a Playa y algún concurso, el resto piteros ilegales que se cargan el patrimonio y malvenden las piezas en mercadillos y algún numismatico sin escrúpulos.
El tesoro debe ser la leche en mano… espero que termine en algún museo expuesto y no en un almacén.