Está anexo al de prehistoria y se pueden visitar a la vez con la misma entrada. También hay exposiciones temporales.
No pude hacer muchas fotos porque estaba casi sin batería en el móvil después de la tracá del arqueológico y necesitaba el WhatsApp y el GPS para poder reunirme con la familia.
Es un museo extraño lleno de artilugios del siglo XX en plan performance, algo así como un almacén del siglo XXII de objetos rescatados de tiempos pasado. Hay un seiscientos, neveras, radios, tocadiscos, Nintendos...
Lo poco que pude fotografiar. Lo mismo algún compañero valenciano puede añadir más fotos.
Esta es que no me pude resistir:
Y una tónica al final para aplacar la sed, en el bar del museo: