Pillado hace dos días en una excursión con mi amiguete
@ManoloSordo", billete muy vivido y con mucha historia en su haber.
Billete local de la Guerra Civil Española: Creado por ayuntamientos, cooperativas, sindicatos y otras organizaciones debido a la escasez de moneda fiduciaria en las pequeñas compras y cambios durante la Guerra Civil Española.
Emisor: LLeida
Tipo: Billete local
Año: 1937
Valor: 25 Céntimos
Unidad monetaria: Peseta (1868-2001)
Composición: Papel
Tamaño: 96 × 54 mm
Forma: Rectangular
Desmonetizado: Sí
Anverso: Florero ornamental con fruta desbordante a la izquierda y una fábrica a la derecha, simbolizando la vocación agrícola e industrial de la ciudad. Texto: 25 CENTIMS (repeated) AJUNTAMENT DE LLEIDA VINT I CINC CENTIMS Emissió feta segons Bases aprovades per l'Ajuntament en sessió del 30 de juny del 1937.
Reverso: En medallón central ovalado y enmarcado por decoración floral, Catedral de la Seu Vella de Lleida, de estilo gótico-bizantino y comenzada a construirse en el año 1202. Texto: Bitllet de curs obligatori a la Ciutat i terme de Lleida.
La Catedral de la Seo Vieja de Lérida, (en catalán: Seu Vella de Lleida) es el monumento más emblemático de la ciudad, se construyó en estilo románico, aunque sus bóvedas son de crucería ojival góticas. Se alza en el cerro conocido como Turó de Lleida que domina la ciudad y la comarca del Segriá.
En Cataluña la persistencia del arte románico hasta el siglo XIII produjo estructuras arquitectónicas como la catedral de Lérida. Su estilo tardorrománico, o de transición, posee las formas románicas y la monumentalidad del gótico.1 Sus portadas y capiteles generaron un importante taller escultórico románico conocido como la Escuela de Lérida.
El magnífico claustro, con su galería mirador sobre la ciudad, se realizó entre los siglos XIII y XIV.
La catedral fue terminada en el siglo XV con la construcción del campanario y la puerta de los Apóstoles.
En el año 1707 y dada su importante posición estratégica, la Seo Vieja se convirtió en cuartel militar, no volviendo a desempeñar funciones religiosas. Aunque ha pasado por momentos de gran abandono, el traslado de los oficios religiosos ha permitido que se conserve el estilo original sin añadidos posteriores de otros estilos.