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La ermita medieval de Onat[/size]
El nombre actual, Eunate, es reciente. Onat es el nombre que desde principios del siglo XIII se ha dado a la ermita y al entorno que la rodea. Su significado en euskera es «cien puertas» y hace alusión a la arquería que rodea al templo. No obstante, todos sus arcos no suman esa gran cantidad.
El origen de esta ermita no está clarificado. Según informan en su página web, «una de las tesis que en un tiempo más adeptos parecía haber ganado era la que atribuye la edificación de Eunate a la Orden de los Templarios».
Esta tesis según los expertos «no ha tenido en cuenta la documentación escrita medieval y que se basa exclusivamente en aspectos arquitectónicos, como el de su planta octogonal o alguna de las marcas de canteros que podemos ver en sus piedras, elementos para algunos más que suficientes».
No obstante, no hay archivos que dejen constancia que la construcción de este templo sagrado pertenezcan a esta Orden. Otras hipótesis que se barajan es que era una parroquia de un lugar despoblado o un hospital de peregrinos jacobeos de la Orden Sanjuanista.
Este edificio octogonal está dedicado a Santa María y fue construido durante el reinado de Sancho el Sabio. Según la documentación existente, la mentora y artífice de esta ermita fue una «reina», a quien atribuyen el nombre de Doña Sancha. La identidad de esta persona también estuvo puesta en duda.
Por último, hay que recalcar que su existencia parece confirmada en muchos documentos. «La tradición decía que dicha reina o dama noble, fundadora de la iglesia y de la Cofradía, estaba enterrada en el claustro. Su sepultura era objeto de un ritual funerario anual, según constaba en las antiguas ordenanzas de la Cofradía de Santa María de Onat. El enterramiento, del que existe un documento hallado en la Catedral de Pamplona, apareció al realizar la excavación en el claustro y contenía un esqueleto completo, perfectamente conservado a pesar de encontrarse a muy poca profundidad», destacan.
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