, compañer@s: el hilo que hoy os presento se lo debemos al compañero Ajuntachapas; él fue quien, al ver algunas de las monedas que de manera suelta subí al foro y que hoy os presento conjuntamente, tuvo la idea de que hiciera una exposición con ellas. Por ello, el post se lo dedico a él.
ETIMOLOGÍA: El término
obsidional es un cultismo latino, que según Corominas en su Breve diccionario etimológico, ya está documentado en nuestra lengua en 1730. Procede de
obsidium (asedio) y este, a su vez, de
obsidere (instalarse enfrente, asediar).
INTRODUCCIÓN: Todo conflicto bélico lleva consigo una notable alteración de las condiciones en las que se desenvuelve la actividad económica. Esta alteración se caracteriza por su brusquedad, en relación con las variaciones que las crisis periódicas de las economías producen en la actividad de este tipo, las que pese a la intensidad que alcance, llegan y se van, en forma más o menos gradual. Si esto es cierto para todas las guerras, lo es más aún, para el caso de las guerras civiles. Pensemos en los casos de la Guerra de Secesión Americana o la Guerra Civil española (1936-1939). En estos conflictos, por una parte la moneda circulante, especialmente cuando está constituida por metales preciosos, tiende a ser acaparada desapareciendo de su curso ordinario, y por otra parte el aislamiento en el que se encuentran determinadas zonas determina que, en algún caso, no puedan recibir de los centros emisores piezas suficientes con las que atender a las necesidades del comercio.
Esta disminución del circulante viene agravada en muchos casos por una mayor necesidad de numerario en circunstancias de guerra para afrontar el pago de haberes a los soldados, garantizar los suministros y adquirir el material necesario para hacer frentes a los requerimientos militares. Estas necesidades han sido históricamente afrontadas mediante la emisiones de las llamadas monedas
obsidionales o de necesidad, acuñadas generalmente bajo autoridades locales cuyo ámbito de actuación se limitaba a una provincia o a un municipio, como es el caso de las emisiones municipales realizadas por muchos ayuntamientos de pequeñas poblaciones ubicadas en ambas zonas durante la Guerra Civil española, siempre realizadas en metales viles y en pequeñas denominaciones.
Estas emisiones de moneda, en realidad fiduciaria, era muy problemática en los tiempos anteriores al siglo XX, cuando veinticinco siglos de circulación de moneda emitida con cantidades razonables de oro y plata habían acostumbrado a la población a no aceptar la moneda como un medio de pago alejado substancialmente de su valor intrínseco. Por ello, históricamente, las monedas de necesidad emitidas en ese tiempo tenían necesariamente una alta proporción de plata, obtenida por lo general mediante la requisa de objetos preciosos de la Iglesia o de los particulares.
Las emisiones de necesidad obedecen también a este doble requerimiento. Por una parte, se emitieron piezas de 8 Reales que pudiéramos llamar convencionales a nombre de Fernando VII en cecas como Reus, Valencia o Cádiz, con tipos más o menos semejantes a los de las emisiones regulares de Sevilla y Madrid, cecas que venían operando al menos desde Felipe III, siempre acuñando piezas denominadas en Reales de Plata, con el peso y ley acostumbrados (26,7 gramos y aproximadamente 900 milésimas), y por otra parte, en aquellos lugares en los que no era posible la disposición de las compleja maquinaria necesaria para la producción de este tipo de acuñaciones, se emitieron piezas labradas con punzones con los que se abren los cuños, cuidando más el peso y la ley de las monedas que lo esmerado de sus diseños. Este sería el caso de las cecas catalanas de Gerona, Lérida, Tarragona y quizá, Tortosa, así como la de Palma de Mallorca.
GERONA: Cito textualmente al Marqués de la Ensenada, en un post de 2012: Esta pieza se acuñó en enero de 1809, entre el segundo (24 de julio- 16 de agosto de 1808) y el tercer sitio de Gerona (6 de mayo - 16 de diciembre de 1809, cuando fue finalmente tomada). No es moneda de sitio como se suele pensar, ya que en el momento de la acuñación de esta moneda, Gerona no estaba sitiada por los franceses, pero sí se encontraba aislada.
Aquí el bando de acuñación de esta moneda:
Don Julian de Bolibar, Brigadier de los Reales Exercitos, Teniente de Rey, Gobernador interino de esta Plaza, y Presidente de la Ilustre Junta de Gobierno de esta Ciudad y Corregimiento, á la que está unida la de Figueras.
La providencia contenida en el Edicto del 26 del próximo pasado Diciembre, para que se presentase la tercera parte de todas las alhajas y artefactos de Plata, de todos los Cuerpos y Particulares de este Corregimiento, y del de Figueras, así Eclesiásticos, como Seglares, y de la no necesaria en las Iglesias, se dirigió á remediar los apuros de esta Tesoreria (que por falta de caudales, se ha visto en la precision de no poder socorrer á las Tropas, ni atender á otros precisos artículos de defensa) por medio de la fabricacion de una nueva moneda del referido metal que supliese la falta de la que está corriente en el Reyno, teniendo la correspondencia, con su intrínseco valor. Habiendo tomado, por la Junta que presido, las medidas necesarias, acordó se fabricasen en esta Ciudad duros, y medios duros de plata, con la inscripción de Fernando Septimo, en una parte; y en la otra, la de Gerona Año de 1808 un duro; y en atencion á que se halla ya existente una porcion de estos nuevos duros: Ordeno y Mando á todas las Personas, Cuerpos, y Comunidades de este Corregimiento, y del de Figueras, que desde la publicacion del presente, admitan en todos tratos, contratos y negocios, como moneda verdadera, y corriente la de dichos duros, y medios duros por el valor que les corresponde, á saber: de 1 libra 17 sueldos 6 los primeros; y 18 sueldos 9 los segundos, al paso que me prometo será también admitida en todo el Principado baxo la inteligencia de que será castigado como á mal Patricio qualquiera que reusare su admision.
Dado en Gerona á 20 de Enero de 1809
Julian de Bolibar
GNA - 1808 - UN DURO / FER - VII 41 mm - 26,7 gramos - Calicó (2008): 102-428.
TARRAGONA: Sacado de un artículo cedido por el compañero Ajuntachapas:
El Fort de l’Oliva, una fortificación que servía para evitar la entrada de las tropas napoleónicas en Tarragona, se empezó a construir el año 1809, pero las obras pararon, ya que era más urgente construir otras fortificaciones. No fue hasta el año 1811 cuando los trabajos se aceleraron. Por norma general, trabajaban 200 hombres, pero a causa del atraso, se contrataron hasta 800 obreros más. Eso valía un dinero. Para poder pagar los gastos de los trabajadores, se tenía que fabricar una moneda.
Como no había plata suficiente, en un primer momento, el Ayuntamiento decidió crear una lotería para pagar las obras, pero así se recaudó poco. También se intentó cobrar, por adelantado, los alquileres de los pisos, pero tampoco. Finalmente, se decidió recurrir a los habitantes más acomodados. Las señoras cedieron sus joyas y los hombres sus relojes. También la iglesia participó, entregando cálices e imágenes de los santos. De hecho, la Catedral de Tarragona dio joyas de incalculable valor artístico e histórico, como por ejemplo una imagen de Santa Tecla, de un metro de altura.
Una vez obtenida la plata, Josep Batlle, venerado de la parroquia de la Selva del Camp, se hizo cargo de la dirección de la moneda. Era una persona que tenía grandes conocimientos de los métodos para fabricar monedas, y unos meses más tarde, el Ayuntamiento comunicó las características de la moneda. «(...) Duros de plata del valor intrínseco de cinco pesetas que los admitan en pago de cualquier deuda (...)», decía la orden del Ayuntamiento de Tarragona.
Con una taladradora se obtenía la pieza redonda de plata de 40 milímetros de diámetro, que se acordonaba con una máquina que recibía el nombre de cerrilla, para evitar falsificaciones. Este artefacto consta de un banco de madera sobre el cual iba montada una placa rectangular de bronce. La pieza metálica tenía unos dientes que movían una rueda y accionando la manivela, se fabricaba el duro. Se han podido determinar un total de ocho variantes del duro de Tarragona y casi todos contaban con el escudo de la ciudad.
En el mes de mayo de 1811 los franceses atacaron la ciudad con las tropas mandadas por el general Suchet. El 4 de mayo de 1811, el general Harispe penetró en el recinto de la ciudad, pero fue rechazado; a partir de este momento los combates fueron muy sangrientos y los bombardeos, continuos. Cabe destacar que la dirección de mando de esta plaza no contó con nadie capaz de coordinar bien su defensa y sucumbió ante el empuje de las fuerzas francesas el día 28 de junio de 1811.
Durante el tiempo que Tarragona fue ciudad libre, se acuñaron dos series de monedas; las unas emitidas por la Junta Local, que son de 5 pesetas, de modelo punzonado, fecha de 1809, y las acuñadas con la maquinaria de la ceca volante para la Junta Superior, que son las de busto, con fecha 1811.
ESCUDO DE CATALUÑA / 5. Ps. - FER. VII. - 1809. 39,5 mm. - 26,7 gramos, 174-653
MALLORCA:
1. 1808 Cito al compañero Monetti, en un post de 2016:
Debido a la escasez de moneda circulante en aquella época en la isla de Mallorca se decidió, por parte de la Junta Suprema de Gobierno de Mallorca acuñar moneda de peso “un duro”. Al no disponer de la maquinaria adecuada para hacerlas redondas, y debido a la extrema urgencia, se aprobó (en sesiones de la Junta Suprema del 12 y 13 de agosto de 1808) el diseño presentado por Tomás Cuscheri. Se trataba de la moneda en forma octogonal.
El 17 de agosto de 1808 se daba a conocer la moneda con un bando que decía:
La Junta suprema de gobierno de este reino ha acordado manifestar al público, que atendiendo á la suma escazes de moneda que se experimenta en la isla, dispuso se acuñase moneda de plata, y estándose verificando la del peso duro que se reduce á un octágono prolongado con las armas de la ciudad en una cara, y en la otra las letras siguientes: 30. s. 1808., con el fin de que tenga toda la autoridad posible, y no experimente embarazo en el tráfico interior de la isla; se manda publicar por bando para que llegue á noticia de todos y ninguno pueda alegar ignorancia. Castillo Real de Palma 17 de agosto de 1808.
En ese bando podemos apreciar que la Junta Suprema consideraba la cara “principal” de esa pieza la que llevaba las armas de la ciudad y “la otra” (que hay que entender como secundaria, es decir, el reverso) en la que aparecía el valor y el año (30. s. 1808.). Es muy lógico pensar que eso era así porque la autoridad que mandaba acuñar esa moneda era la que quedaba representa por el escudo de la ciudad y no otra institución.
Por lo que comenta el numismático balear Álvaro Campaner, de los acuerdos de las sesiones de la Junta Suprema se puede entender que la moneda octogonal fue una emisión de extrema emergencia ya que a los pocos días, según parece el 17 de agosto (¡el mismo día que se publica el bando dando a conocer la pieza octogonal!) , la Junta Suprema llama a Tomás Cuscheri (que se supone que lleva unos días elaborando la octogonal) y se le ordena que se ajuste a la forma redonda de un duro presentado por “un tal Bonnin”. De hecho, se le ordena que haga duros redondos una vez agotadas las planchas que ya tenía preparadas para hacer las octogonales. De alguna forma la maquinaria para hacer duros redondos ya estaría disponible. En esa misma sesión se acuerda que Bonnin y Cuscheri elaboren duros redondos y ambas piezas tienen que incluir la leyenda “FER. VII”.
Imagino que la aprobación de la elaboración de los duros octogonales fue una decisión muy precipitada y en cierto modo la Junta Suprema pudo “arrepentirse” de ello porque es posible que le trajera algunos quebraderos de cabeza. El duro redondo presentado por Bonnin a pocos días después de aprobar la emisión de los octogonales es posible que gustara mucho más a la Junta Suprema que la pieza octogonal y Cuscheri pudo continuar con “sus” duros octogonales solamente porque el encargo ya estaba hecho y el trabajo se encontraba avanzado. De hecho, en la sesión de la Junta Suprema de Gobierno del día 7 de setiembre el Sr. Intendente propone que se recojan los duros octogonales que circulaban sin el nombre del rey “para que se les pusiera” y que se publique un bando dando a conocer los duros redondos que, según parece, ya se estaban acuñando. Se entiende que la Junta Suprema advirtió a Cuscheri de que en las piezas octogonales también tenía que figurar la leyenda “FER. VII”. El bando a que hace referencia el Sr. Intendente en la sesión de la Junta Suprema del 7 de setiembre y que se publica el día 9 de ese mismo mes es muy claro en relación al tema que nos ocupa. Dice así:
La Junta superior de gobierno de este reino que viendo cerrada la comunicación con la capital de España y con Barcelona, y con ella cerrados también los medios de suplir el gran déficit de once millones anuales que resulta á esta Tesorería de ejército, y que adoptó entre otros arbitrios el de acuñar y autorizar la circulación de unas monedas provinciales octágonas del valor de un duro, que fueron las únicas que por de pronto se pudieron acuñar faltado las máquinas y demás necesario para hacerlas redondas, y con el busto y rótulo de su amado Soberano el Sr. D. Fernando VII.; tuvo la satisfacción de haber podido proporcionar el que se pusiera el nombre de su legítimo Rey desde luego, y el que acuñasen duros redondos, que tuviesen las armas de Mallorca en la una cara y en el reverso el nombre de S. M. con las letras FER•VII. y dos rótulos que dicen: 30. s. – 1808. Por tanto y como cuando se suspendió la circulación de los octágonos hasta poner el nombre de S. M. ya se habían entregado unos cuarenta; se hace saber al público, y se manda que el que tuviese en su poder alguna de dichas monedas, las entregue en la Tesorería de ejército, donde recibirá su valor en otra moneda de la misma especie con el nombre del Rey, ó en otra suerte: y además manda la Junta que se circule y nadie pueda rehusar admitir por valor de un duro las dichas monedas octágonas con el nombre del Rey, y las redondas descritas arriba, prohibiendo al mismo tiempo la circulación de las que no llevan el nombre de S. M.
Dado en el castillo Real de Palma á 9 de Setiembre de 1808.
ESCUDO DE PALMA DE MALLORCA (palmera sobre M) / 30. S. - FER. VII - 1808 32x36 mm. - 26,6 gramos - 128-529
ESCUDO DE PALMA DE MALLORA (palmera sobre M) / 30. S. - 1808. 32,5x36 mm - 27 gramos - 128-521
ESCUDO DE PALMA DE MALLORCA (palmera sobre castillo) / 30. S. - FER. VII - 1808 39 mm - 26,5 gramos - 129-522
ESCUDO DE PALMA DE MALLORCA (palmera sobre castillo) / 30. S. - FER. VII - 1808 (todos los datos, incusos) 38 mm - 26,6 gr - 131-524
2. 1821 Leer el magnífico trabajo del Marqués de la Ensenada sobre "El duro de la Epidemia, 1821. Cito enlace:
https://www.imperio-numismatico.com/t44197-30-sous-1821-fernando-vii-palma-de-mallorca-el-duro-de-la-epidemiaESCUDO DE PALMA DE MALLORCA - SALUS POPULI / 1821 - FRº. VII - 30. SOUS - 41 mm. - 26,8 gramos - 132-525
3. 1823 El Trienio Liberal, que recuperó la Constitución de Cádiz frente al Absolutismo de Fernando VII, supuso un intento de modernización del sistema monetario que no llegó a cuajar, los gobernantes del Trienio emprendieron, el 25 de junio de 1821, una política coherente de elevar las tarifas de compra en las cecas, se bajó el coste de acuñación o derechos percibidos por los talleres monetarios (el señoreaje, según el cual la emisión de moneda era una prerrogativa de la Corona y contemplada como fuente de ingresos fiscales) y ajustar la moneda propia a las cotizaciones de las extranjeras, con el fin de evitar o dificultar su extracción (sacar moneda de plata del país para venderla como metal).
Los efectos de estas aparentemente beneficiosas medidas no pudieron sentirse por la irrupción de las tropas del duque de Angulema (los Cien Mil Hijos de San Luis). El tradicionalismo monetario retornó en 1823, toda vez que derogó la constitución de Cádiz y restableció el gobierno absolutista de Fernando VII.
En Mallorca, pasada la epidemia de fiebre amarilla, que se sufragó con la emisión en 1821 de monedas de emergencia de 30 sous, la Diputación Provincial de Baleares se ve obligada en el año 1823 a acuñar nuevamente monedas de necesidad de plata, al reproducirse escasez de numerario en las Islas.
La acuñación se efectuó, como en las veces anteriores, con plata procedente de aportaciones de particulares y de Culto, con una ley de 10 dineros y 16 granos, y actuaron como directores de la acuñación los hermanos Basili y Antoni Canut, que también lo fueron en el año 1821.
El 29 de agosto de 1823 se hace cargo la Diputación del acuerdo tomado de iniciar una nueva acuñación en Palma, de la misma ley que la corriente en la Península.
El 8 de octubre de 1823, se informa “que aquella tarde, empezaban a cortarse las planchuelas o cospeles para la acuñación de los duros de necesidad, y que dentro de diez días, podría estar disponible una regular cantidad de ellos”.
Durante los preparativos de acuñación se abolió el régimen constitucional, aunque se acuñaron monedas con esta leyenda; las nuevas, de acuerdo con los tiempos, se acuñan con una nueva leyenda e inician las acuñaciones del segundo período absolutista del reinado de Fernando VII, conocido como “la década ominosa” (1823-33).
Por ello, existen monedas de 5 pesetas con la leyenda FERN 7º P• LA G•D•DIOS Y LA CONST• [o CONSTI] y FERN. 7º P. LG.D.DIOS REY D.ESPAN. E YND
En el año 1824, la Ceca se cerró definitivamente.
YSLAS - BALEARES - 1823 / 5 P y escudo de Palma de Mallorca - FERN 7º P. LA G. D. DIOS Y LA CONST. 39 mm - 26,8 gramos - 138-531
VALENCIA: por último, no podía faltar la presentación de esta moneda de Valencia, también obsidional, fechada en 1823, con un valor de 4 reales de vellón –antiguos 2 reales–, que refleja el sitio de la ciudad por los Cien Mil Hijos de San Luis. De todas las españolas, las ciudades de Cádiz (no podía ser de otra manera), las catalanas y Valencia fueron las últimas en rendirse. Valencia, en concreto fue la última: aguantó el asedio hasta junio de 1824.
Busto del rey - FERN.7º.POR LA G. DE DIOS Y LA CONST. 1823. / ESCUDO CORONADO BAJO MURCIÉLAGO DE VALENCIA ENMARCADO POR EL VALOR Y LA DOBLE L - VAL. SITIADA POR LOS ENEMIGOS DE LA LIBERTAD 25 mm. - 5,9 gramos - 225-921
Espero que el hilo sea de vuestro agrado. Un saludo.