He visto ponderales con las letras “N” y “B” dentro de un cordoncillo circular que asemeja a una corona de espinas, pertenecientes a los siglos VI o VII.
Los ponderales con letra S:
Estas piezas fueron utilizadas para el peso de lingotes de metal precioso, en
el pesaje de moneda, en el comercio en general y como juego de inspección
y verificación. Por ello, la precisión del ponderal era comprobada por un
oficial marcador que grababa su marca o contraste en el peso como garantía
de su fidelidad y validez. Estas marcas se denominan “marcas de
verificación” y suelen estamparse en la tapa de la caja, en el fondo o en los
bordes exteriores de los vasos. Pero no es este el único punzón que puede
aparecer en este tipo de objetos, ya que podemos encontrar en ellos el
escudo de armas o el nombre de la ciudad en la que fueron aprobados o
utilizados, las cifras correspondientes al valor o peso de cada vaso, la
marca cronológica y las del taller o del maestro artífice del ponderal.
El mayor número de marcas de talleres y maestros conocidos corresponden
a la ciudad de Nuremberg, en una actividad que se desarrolló desde el siglo
XIV al XIX, aunque la mayoría de la producción se sitúa entre los siglos
XVI y XVIII, cuando la ciudad mantuvo el práctico monopolio de esta
industria. De este modo, los numerosos ponderales fabricados para la
exportación eran marcados con la inicial del nombre del país de destino que
en el caso concreto de España es una S, del alemán Spanien.
Mi único consuelo es pensarte cuando tu no estas (ESTRELLA)
“Donde una puerta se cierra, otra se abre”.