El 23 de febrero de 1934 el rey de los bélgas Alberto I, moría en un accidente mientras escalaba una montaña en la región de las Ardenas y subia al trono su hijo Leopoldo.
Su reinado fue muy convulso, pues año y medio despues de su coronación, sufría un accidente automovilístico en Suiza a consecuencia del cual moría su esposa la reina Astrid. Por otro lado la crisis económica que sacudía Europa tras el crac de 1929 y el expansionismo alemán, con la anexión de Austria y de los Sudetes, hicieron que esos primeros años de su reinado fueran muy difíciles. Aunque lo que venía fue aun peor, especialmente tras la invasión de Bélgica en mayo de 1940.
De esa época difícil y convulsa es esta moneda de 25 céntimos de franco con diseño de Oscar Jespers.
Se acuñó en los años 1938 y 1939 por la ceca de Bruselas en latón-níquel, con un peso de 6,47 g y 26 mm de diámetro. La tirada en 1939 fue de 7.732.000 monedas.
En el anverso el nombre del país en francés y flamenco. Y tres escudos en representación de las tres regiones lingüisticas belgas: la bilingüe Bruselas (izquierda), la valona Mons (arriba) y la flamenca Brujas (derecha).
En el reverso el monograma del rey Leopoldo III.
Como excepción a la norma que había en las monedas belgas de acuñar una moneda en francés y la misma en flamenco, en este caso no se acuñó la que debía tener en primer lugar la palabra België. Si se hizo en la de 1938.
Por otro lado y tras la invasión alemana, en 1942 y hasta 1946 se acuñó esta misma moneda pero en zinc.
Alles mit dem Volk, Alles für das Volk