La invasión de Polonia por parte del ejército alemán, en septiembre de 1939, fue el detonante del estallido de la Segunda Guerra Mundial. Ante el temor de una invasión por parte de Alemania, el príncipe Pablo firmó el Pacto Tripartito con las potencias del Eje el 25 de marzo de 1941, lo que provocó disturbios en Serbia. El 27 de marzo, Pablo fue derrocado por un golpe de Estado apoyado por las potencias aliadas, y sustituido por el rey Pedro II Karađorđević, sucesor legítimo del trono.
A pesar de que el nuevo gobierno no declaró formalmente su enemistad con el Eje, el 6 de abril de 1941 Adolf Hitler puso en marcha la Operación Castigo, ordenando la invasión de Yugoslavia. Ese mismo día, la Luftwaffe bombardeó Belgrado, y el 17 de abril se firmó la rendición incondicional del país. Después de la invasión, el Reino de Yugoslavia fue disuelto: en Serbia se instauró un gobierno militar colaboracionista, gestionado por el general Milan Nedić; otras zonas fueron repartidas entre los países del Eje, y con Croacia y Bosnia se creó el Estado Independiente de Croacia, bajo el gobierno de Ante Pavelić, jefe del partido fascista croata Ustacha.
La resistencia a la ocupación se organizó en dos frentes: por un lado el movimiento partisano, de inspiración comunista y liderado por Josip Broz Tito, y por otro los Chetniks, de orientación monárquica y proserbia, cuyo comandante fue Draža Mihajlović. Mientras estas fuerzas se enfrentaban a los invasores, en Croacia comenzó el exterminio sistemático de serbios, judíos y gitanos, llevado a cabo por el régimen ustashi, que instaló varios campos de concentración, siendo el más destacado el de Jasenovac. Según cálculos, entre 500 000 y 700 000 serbios fueron asesinados.
A principios de 1944, los partisanos se convirtieron en la fuerza principal de resistencia en Bosnia, Montenegro, Eslovenia y Herzegovina. En Serbia, sin embargo, especialmente en las zonas rurales, la población simpatizó más con los chetniks. En septiembre de 1944, el avance del Ejército Rojo casi alcanzaba Yugoslavia, por lo que Tito viajó a Moscú y coordinó con Stalin la acción conjunta contra las fuerzas del Eje. El 20 de octubre de 1944, las tropas partisanas y el Ejército Rojo tomaron Belgrado en una operación conjunta, y para el final del año, la mitad oriental de Yugoslavia había sido liberada completamente. En abril de 1945, Sarajevo fue liberada también, y Croacia y Eslovenia el mes siguiente. Antes de acometer la pacificación del país, los partisanos tuvieron que enfrentarse también a los chetniks, lo que desencadenó un conflicto civil entre ambas fuerzas.
P#27a: Retrato de perfil del rey de Yugoslavia Alejandro I (Alexander Karadordevic) (1888 - 1934)
Pais: Serbia
Banco Emisor: Banco Nacional de Serbia (Српска Народна Банка)
Período: Ocupación alemana
Tipo: Billete estándar
Año: 1941
Desmonetizado: 1942
Valor: 500 Dinares
Divisa: Dinar de la Segunda Guerra Mundial
Composición: Papel
Tamaño: 168 × 95 Milímetros
Forma: Rectangular
Anverso: Mujer serbia vistiendo traje nacional. / Texto: Banco Nacional de Serbia, Paga al portador quinientos dinares serbios - Belgrado 1 de noviembre de 1941 - La falsificación de billetes es punible según las disposiciones del Código Penal que se aplican a la culpa por falsificar dinero.
Diseñador: Veljko Andrejević Kun
Reverso: Albañil llevando ladrillos y una paleta de albañil. / Texto: Banco Nacional de Serbia, paga al portador quinientos dinares serbios
Diseñador: Veljko Andrejević Kun
Imprenta: Imprenta estatal serbia (ZIN - Zavod za izradu novčanica i kovanog novca), Beograd, Serbia