El antoniniano es una moneda creada por Caracalla (que, en realidad y como su sobrino Heliogábalo, se llamaba Antonino) con un valor de dos denarios. Se caracteriza porque el emperador lleva corona radiada, y no de laurel como en los denarios. Comienza siendo de plata, pero se va devaluando y termina siendo de bronce. El antoniniano desaparece con la reforma monetaria de Diocleciano. Este es un antoniniano de Galieno y en su época solían ser de plata baja o de vellón, también alguna de bronce plateado.