Con motivo de una peste en el 430 a.C., se estableció en Roma el primer templo en los campos Flaminios, reemplazando un antiguo lugar de culto conocido allí como el Apollinare. Durante la Segunda Guerra Púnica en 212 a.C. los Ludi Apollinares (‘Juegos Apolíneos’) fueron instituidos en su honor, siguiendo las instrucciones de una profecía atribuida a un tal Marcio.
Augusto construyó un templo de Apolo cerca del templo de la Madre Magna sobre la colina Palatina, dentro del pomerium, lo que aumentó su importancia. Augusto sostuvo que Apolo le ayudó a su victoria contra Marco Antonio y Cleopatra en la batalla de Actium. De hecho, Augusto también fundó un templo de Apolo por las afueras de su nueva ciudad de Nikopolis cerca de Actium, e instituyó un festival cada cuatro años de Apolo Actian a través del mundo helénico.
El templo sobre el Palatino tuvo un papel importante en los Juegos Saeculares de Augusto; durante su tercer día, debido a su ubicación, se efectuaban sacrificios y rezos a Apolo y Diana, y el primer canto del himno Saecular.
Existían otros templos de culto a Apolo:
Templo de Apolo Medicus: En Roma, probablemente junto al templo de la diosa de la guerra Belona.
Templo de Apolo en Termón, en Etolia.
Templo de Apolo Agieo (‘protector de las calles’) en la ciudad de Megalópolis, en Arcadia.
Templo de Apolo en Apolonia.
Templo de Apolo en la isla de Ortigia, en Siracusa (Sicilia).
Templo de Apolo en Figalia, en Arcadia.
Templo de Apolo en Corinto.
Templo de Apolo en Delos.
Templo de Apolo Delfinio en Dreros, al noreste de Creta (siglo VIII a.C.).
Templo de Apolo Didymeus: El Didymaion arcaico fue un templo jónico octástilo cerca de Mileto, en la costa de Anatolia, al suroeste de Sardes (Lidia). Fue el cuarto santuario en el mundo griego después de los templos de Artemisa, Heraion de Samos y el Olympieion en Sicilia. El Didymaion fue construido para competir con el de Artemisa. El culto a Apolo en este templo data del 301-300 a.C., en el que los sacerdotes del linaje de los bránquidas recibían su inspiración bebiendo de un manantial curativo ubicado en el templo.
También existieron los siguientes santuarios oraculares:
En Hierápolis Bambyce (Asia Menor), según el tratado De Dea Syria, el santuario de la diosa siria contenía una imagen de Apolo con túnica y barba. Las adivinaciones se hacían a partir de los movimientos espontáneos de esta imagen.
En Delos había un oráculo de Apolo Delio durante el verano. El hieron (‘santuario’) de Apolo adyacente al Lago Sagrado fue el lugar donde se cree que nació el dios.
En Corinto, el oráculo venía de la ciudad de Tenea, de prisioneros supuestamente capturados en la Guerra de Troya.
En Basas, cerca de Figalia (Peloponeso), se erigió un templo de Apolo obra del arquitecto Ictino.
En Abas (Fócida).
En el templo de Apolo en Delfos, la Pitia se llenaba del pneuma de Apolo, que se decía que venía de un manantial dentro del adyton.
En Patara (Licia) había un oráculo de Apolo en invierno, del que se decía que fue el lugar al que el dios fue desde Delos. Como en Delfos el oráculo de Patara era una mujer.
En Claro, en la costa oeste de Asia Menor, al igual que en Delfos una fuente sagrada daba un pneuma del que bebían los sacerdotes.
En Segesta (Sicilia).
También daban oráculos algunos hijos de Apolo:
En Oropo, al norte de Atenas, estaba el oráculo de Anfiarao y también una fuente sagrada.
En Lebadea, unos 30 km al este de Delfos, Trofonio mató a su hermano y huyó a la cueva donde más tarde sería consultado como oráculo.
Templo tetrástilo de Apolo Didymeus. Cistóforo de Adriano. Miletos 128 d.C.