Buenas noches.
Después de muchos años leyendo este foro y sobre todo, después de coleccionar monedas desde los 10 años, me animo a participar en el foro como un usuario más.
Mi historia en la numismática es rápida y simple:
- Empecé a los 10 años coleccionando moneda extranjera (con las típicas monedas que te dan los parientes cuando regresan del extranjero). La afición empezó gracias a un tío mío que coleccionaba relojes y algunas monedillas, y de otra tía que juntaba lo que le iban dando más cosas que compraba por ahí (con conocimiento escaso o nulo del mundillo).
- Sobre los 14 años me aburrí de coleccionar chatarra forastera sin ton ni son, así que decidí centrarme en series actuales (de aquellos años) de países del mundo; el resultado fue un gran fracaso, porque a esa edad, sin dinero, sin internet todavía, y Portugal como único país visitable para mí, me cansé de acaparar escudos roñosos, rayados y oxidados.
- Sobre los 16 años mi tía ya había juntado una colección bastante maja de Franco incluso con una de 100 pesetas del 66, y como yo no iba a ser menos que mi tía, me aventuré a coleccionar monedas de Juan Carlos y Franco dejando la chatarra extranjera oxidándose en un cajón.
- A los 20 años tenía una colección básica con todo lo salido de Juan Carlos I en calidades SC (incluso las dificilísimas monedas del Mundial del 82
), menos claro, las típicas del Duro del error, CyL sin la Y, etc... El tema era superar a mi tía.
- A los 22 me tiré a la piscina adquiriendo ejemplares tan interesantes como la cartera E-87, XXV aniversario bodas de los reyes, 2000 pesetas de plata anuales, etc. Ya con todo esto decido lanzarme a por Franco para dar la estocada a mi tía, pero resulta que para este año ella ya pasaba de todo e incluso me cedió la colección completa. Como yo ya tenía un poco de bagaje y el paladar algo fino, empecé a separar la chatarra de lo SC, quedando únicamente como potable las valiosas pesetas de Franco *74 y *75, todo un logro
. Si recordáis la moneda de 100 pesetas que tenía mi tía en esa colección, cuando me la dio descubrí que era *66, pero tan rayada que parecía que a Paco le había crecido el pelo a lo Van Halen.
- A los 23 años, tras haber superado a mi tía y con un bolso lleno de dinero gracias a mis trabajillos de verano, me lancé a por ese mundo de conmemorativas de plata de peseta de la FNMT con su estuche y certificado, que por alguna razón que no entiendo (años 2010-2015) estaban tiradas de precio.
- Después de llegar a juntar unas 80 monedas de plata de la FNMT en peseta descubrí el mundillo de los Euros en plata, el cuál deseché inmediatamente tras ver que esta "preciosa" moneda de 10 € la FNMT la vendía a precio de 60,50 €;
más que nada porque si quiero que me timen me meto en internet y me pongo a dar mis datos bancarios a todos los mensajes de spam que me lleguen. Por lo menos me dejo timar por profesionales.
- Craso error, porque a los 25 descubrí la ciudad de Madrid y su flamante mercado, donde también descubrí que los timos no vienen solo de la FNMT y del spam de internet, sino de vendedores que te cuelan por 12€ 50 cts de la II República que en donde debería haber dos estrellas había rayajos de una lima de uñas. Hoy día pienso que fue un mal negocio, puesto que debería hacer negociado un poco más, y que con la moneda me hubiese regalado la lima de uñas. El caso es que con esta visita al mercado me entró el gusanillo por las monedas del Centenario, II República y sobre todo, Guerra Civil. También me entró el gusanillo por las monedas de euro en circulación por considerarlo una afición divertida y fácil, de la que tras acaparar unas 1.200 monedas me arrepiento completamente (muy frustrante tener huecos en el álbum porque a Bélgica, por ejemplo, le da por sacar tiradas de mierda para determinadas monedas).
- Así que hoy día y tras varias timadas me centro en monedas de la Guerra Civil, los asquerosos euros (lo estoy dejando), el Centenario, y poco a poco en la
deepcoin de los reales, maravedíes y escudos anteriores a Isabel II. También voy recogiendo monedas de peseta de la FNMT en plata sueltas y desamparadas, para buscarles cápsula, caja y certificado para revenderlas como pack conjunto; pero esto más como acto de buen saramitano, porque no se saca un chavo con ello.
Y con esto finaliza mi historia.
Lo cierto es que leo en el foro mucho pesimismo en cuanto a temas de falsificaciones y demás, así que si lo veo chungo en lugar de
deepcoin me refugiaré en las chapas de cerveza o las piezas de Lego. En el tema de la Guerra Civil hay de todo y bodrios de los buenos en venta en cualquier sitio, pero la experiencia ha conseguido que se sienta cómodo en este triste periodo histórico, aunque seguro que en más de una me la han colado.
Por cierto, la palabra
numismática en el campo de escritura de post de este foro aparece subrayada en rojo como si tuviese una falta de ortografía. Mal empezamos...
Gracias por leerme.
P.D.: no sé si existe algún hilo al respecto, pero en la Guerra Civil -por boca de muchos que la pasaron y con quienes he tenido la oportunidad de hablar-, en casi todos los pueblos y aldeas del Norte de España las monedas de necesidad eran algo muy común, y que en cada localidad había las suyas (casi incluso en cada tienda), de tal modo que los catálogos actuales sólo contemplan un minúsculo porcentaje de lo que realmente se acuñó en esos trágicos años. El problema que veo a estas series por ejemplo, es convencer a un coleccionista profesional que unas chapas de hierro oxidado con un 2 marcado son monedas de necesidad que sólo se usaron en Piornedo y jamás salieron de allí. Así que podría decirse que en mi colección tengo monedas que únicamente lo son porque yo lo creo así.