Siempre puede cambiar el nombre de la empresa sencillamente a "Herrero", que es como la conocemos casi todos, o incluso a "Sucesores de Herrero".
En cualquier caso, deseo que la empresa siga adelante. Fue la casa de subastas donde primero pujé, donde gané mi primera moneda en subasta, y donde otra vez, ante mi típica pregunta de novato, me explicó el mismo señor Herrero amablemente en una magnifica charla como distinguir las monedas auténticas de las falsas de la tira del 69 de Franco. Una tarde para no olvidar.
Hay más monedas que comprar que dinero tendrás para gastar