Hola a todos, para esta ocasión quiero presentar una moneda bastante singular. Si bien es sabido que no tengo demasiadas monedas medievales en mi colección, ésta me ha llamado muchísimo la atención por la
particular contramarca que lleva, usual en otro tipo de monedas del Nuevo Mundo, pero no en medievales castellanas. Dicho esto, se trata de una
Blanca acuñada según las directrices del Ordenamiento de
Segovia (1741) en
Ávila bajo el reinado de
Enrique IV.
Datos de la pieza:Nominal: Blanca
Año: N.D. (C.a. 1471)
Ceca: Auila/Abulia/Abulae (Ávila) con marca de una “estrella” debajo del león. Supuestamente, correspondiente a la marca de la ceca de la Corte Real, en el caso que nos ocupa, propio del reinado de Isabel I de Castilla, que lo hizo suyo de manera permanente.
Diámetro: 18 milímetros
Peso: 0,78 gr (aprox.)
Metal: Vellón
Reinado: Enrique IV de Castilla “El Impotente”
Dinastía: Casa de Trastámara
Estado de conservación: MBC-
Nº de piezas acuñadas: N.D.
Simbología:Anv.: “
+ ENRICVS : DEI : GRACI :” alrededor del escudo con las armas del Reino de Castilla en forma de rombo. Bajo la base del castillo, letra “A” en alusión a la ceca, Ávila. Sobre la torre central del castillo, vemos un resello en forma de “llave” que desciende hacia el centro del mismo. Esto último es bastante común de ver en las piezas acuñadas en Santo Domingo a nombre de Carlos I y Juana “La Loca”, pero no es propio de una moneda medieval.
Rev.: “
+ XPS : VINCIT : XPS : REGINA” alrededor de cuadrado que contiene las armas del Reino de León, que mira desafiante hacia la izquierda.
Otras observaciones: La pieza muestra evidentes señales de circulación, dados los medios tan toscos que existían en la época para la acuñación de moneda y al tiempo que presumiblemente estuvieron circulando estas monedas, llegando muchas de ellas hasta casi principios del siglo XX en algunas provincias del norte peninsular. Igualmente, lo más llamativo de la moneda es, precisamente, el resello en forma de “llave” que puede apreciarse con facilidad en el anverso de la moneda y que nos evoca a los tiempos del descubrimiento del Nuevo Mundo. Pero, de ser así, ¿cómo pudo acabar esta pieza con tan icónico resello? Es difícil dar una respuesta acertada y, a día de hoy, y con tan poca información sólo podemos hacer especulaciones al respecto. Dicho esto, yo me decantaría por alguna de las siguientes
3 hipótesis, teniendo en cuenta que el uso de este resello en concreto está totalmente documentado:
a. Que
formara parte de algún envío al Nuevo Mundo, ya sea de la mano de los distintos partícipes en los descubrimientos de nuevas tierras para la Corona de Castilla o a modo de remesa enviada desde la península, a petición del Virrey, pues está registrado las necesidades de moneda fraccionaria en los territorios recién descubiertos para el normal uso de las transacciones económicas.
b. Ligada a la hipótesis anterior, esta moneda
pudo ser enviada a tierras americanas y, posteriormente, venir con alguna remesa de monedas procedentes de Santo Domingo, donde la ley de estas monedas era inferior a la establecida en la península, lo que pudo motivar que fuera resellada junto con las demás. Igualmente, estas monedas “no válidas” siguieron circulando en otros territorios, como Cuba, Jamaica o Canarias.
c. Que
el resello fuera un estampado de época para los fines anteriormente descritos, pero
realizado por particulares y al margen de la autoridad oficial o, incluso, que su estampación fuera muy posterior a modo de “falsificación” para crear una rareza numismática.
Independientemente de cuál sea la respuesta, está claro que cuestiones como estas hacen que nunca dejemos de aprender y sorprendernos dentro de esta bonita afición.
Fotos:ReselloEspero que os guste!
Saludos.