Ante todo, es necesario especificar que la imitación de moneda clásica (griega, romana y bizantina, en rigor, romaniona) fue una practica extendida entre los pueblos bárbaros contemporáneos y hasta varios siglos posteriores, destacando las acuñaciones celtas, bactrias e  islámicas, etc.

Estas piezas poseen gran valor histórico y representan la potente influencia de la cultura clásica en poblaciones bárbaras.

Con el advenimiento del renacimiento, en la primera mitad del siglo XIV aumentó la demanda por antigüedades, y empezó el mercado de las reproducciones con motivos clásicos, destacando en Italia los medallones paduanos de gran estilo artístico, en especial las obras de maestros como Cavino y Cellini (Figura N°1).

La falsificación en la era moderna estuvo marcada por los trabajos de Becker (Figura N°2), considerado uno de los mejores reproductores de moneda griega, las falsificaciones de Caprara y las copias de medio oriente.

En el siglo XX destacan las peligrosas reproducciones de Christodoulou, de las cuales el gobierno griego habría incautado cerca de 1000 cuños para el anverso y 500 para el reverso, destaca en sus obras el decadracma de Atenas. 

En la actualidad la industria de la reproducción cuenta con artistas reconocidos y con piezas de arte con valor artístico  intrínseco, como las de Peter Rosa, que señalan su condición de copia, las falsificaciones del museo británico de Costadoulos y las más peligrosas falsificaciones Slavey (Slavey Petrov) y la escuela búlgara.

- Tipos de producción de falsificaciones -

A continuación se detalla brevemente algunos tipos de producción de falsificaciones:           

1.                Fundición: se crea un molde de la moneda verdadera y se vierte metal fundido para la producción. Se caracterizan por presentar una superficie granulosa, con porosidad (Figura N°3). A veces, ambas caras no coinciden por lo que en el borde aparece una costura de fundición que esta limada. Actualmente se puede crear un molde de caucho o de plástico, técnica utilizada por joyeros para capturar detalles de manera muy precisa. En ellas se puede distinguir un pequeña saliente de metal de un borde que delata la factura (Figura N°4).

Figura N°3: Ampliación de Sestercio de Tito, se observa la granulación y los bordes poco definidos.

Figura N°4: 
En este Stater de Corintia se aprecia el exceso de metal de fundición en los bordes, habitualmente recortados o pulidos.

2.                Electrotyping: se crea un molde de la moneda y por galvanoplastia se agrega el metal. En este tipo de producción se forma un molde del original, en arcilla, luego es espolvoreado con grafito y por galvanoplastia se crea una capa de cobre que replica ambas caras de la pieza por separado. Se utiliza habitualmente un corazón de plomo para darle peso a la moneda. En este caso, la detección se realiza al observar la unión de estas caras en el borde de la moneda (Figura N°5), al tener el corazón de plomo difícilmente homologan el peso de la original. Como habitualmente se copian piezas de oro y plata y se utiliza cobre para falsificar, la apariencia general de la moneda es muy sospechosa.

Figura N°5: Bordes soldados

3.                Acuñación por labración de un cuño nuevo o  impresión de uno preexistente. Son el tipo más peligroso y más utilizado en la actualidad para las piezas de mayor calidad, sin embargo, reproducir una imagen no implica solo copiarla; existe el estilo artístico que es dependiente de muchos factores subjetivos y que con el tiempo se aprende a reconocer en las obras de los mismos falsificadores. Hay que considerar que no hay mas de dos o tres Celadores por pieza, por lo que se conserva una forma única de expresión, solo Becker estuvo cerca de captura ese estilo en una de sus trescientas piezas, por lo que este factor determina una potente arma de detección de falsificaciones. Un microscopio es útil para ver las líneas de acuñación y los detalles del desgaste. Si bien existe el tallado de cuño por maquinas, este método pierde aun más el estilo artístico y en el de tallado por mano, la riqueza de detalles. En conclusión, no existe el cuño moderno perfecto.

4.            Tallado: es un proceso por el cual la moneda es tallada, por lo general a mano, aunque hay formas de hacerlo por máquina. Normalmente, esta técnica se ocupa para dar mas detalles a una moneda original o para dar rareza a una pieza común. Esta técnica se utiliza habitualmente en monedas de cobre y bronce, ya que en oro y plata es muy difícil ocultar las marcas de la herramienta (Figura N°6). En general, la factura es burda, una adecuada lupa o microscopio ayudan para la detección de estas piezas. Se considera en este grupo las piezas que han sido “instrumentalizadas” para mejorar su apariencia en el proceso de limpiado.

Figura N°6: Bronce genuino tallado en varias zonas.

Concepto	Comentario
1. Flan roto es signo de autenticidad	Si bien muchas monedas tienen “cortes de prueba”, o marcas de banqueros, esto se puede reproducir fácilmente. La amonedación griega disponía de un soporte de madera para el cuño de reverso, disminuyendo así la sobre acuñación por vibración de los bordes de los detalles de las figuras, las cecas romanas lo reemplazaron por uno de hierro, lo que favorecía el quiebre del cuño o del flan.
2. Flujo de líneas en la superficie sugieren autenticidad	Son más bien signos de acuñación, falsa o autentica, en algunos casos delata la limpieza del flan.
3.      Cristalización ocurre solo en metal antiguo	Falsificaciones modernas también pueden ser cristalizadas posteriormente. Este fenómeno traduce la “salida” a la superficie de los metales menos nobles que se utilizan para dar consistencia a la plata.
4.      Monedas acuñadas por presión de troqueles fundidos son borrosas	Tecnología actual permite disminuir esta característica.
5.      Monedas con porosidad en la superficie y falta de definición en detalles son fundidas	La corrosión natural y una débil acuñación pueden hacer aparecer una moneda genuina como reproducción fundida.
6.      Monedas fundidas siempre tiene granulaciones en forma de burbuja en su superficie	Reproducciones fundidas y centrifugadas, especialmente en plata y oro pueden estar libres de granulaciones.
7.      Monedas baratas no son de interés para falsificadores	Todas las monedas son del interés de falsificadores.
8.      La mayoría de las falsificaciones son fundidas no acuñadas	Verdadero, pero no siempre.
9.      Todas las monedas fundidas son falsas	Algunas monedas orientales fueron fundidas.
10.       El peso es un indicador confiable de autenticidad	Es un buen indicador, pero no concluyente en si mismo.
11.       “Cuernos de plata” son garantía de autenticidad. (Figura N°7)	La plata no desarrolla patina, el oscurecimiento que adquiere con el tiempo se llama tonificación, los óxidos, principalmente el cloruro de plata forma una superficie amarillenta, brillante y con protuberancias. Modernas falsificaciones pueden posteriormente ser recubiertas con cuernos de plata (horn silver).
12.       Tesorillos sin limpiar (como habitualmente se encuentran las monedas de bronce enterradas) están libres de falsificaciones	Es el medio preferido por los estafadores para distribuir las falsificaciones.
13.       Bordes recortados o raspados indican falsificación	Muchas monedas de plata genuinas, especialmente del imperio romano tardío, fueron recortadas para recuperar el metal precioso, no se aplica esta regla para el bronce.
14.       El estilo es un patrón subjetivo de autenticidad	En algunos casos, como lo referido anteriormente es el único recurso para la determinación de falsedad.
15.       Monedas con pedegree son seguras	Antiguos pedegrees solo aseguran que la pieza, falsa o autentica, no es moderna, existen casos emblemáticos de subastas de falsificaciones con procedencia conocida, en destacadas casas de antigüedades internacionales.
16.       Si es brillante y hermosa, probablemente es una falsificación	Si es brillante y hermosa, probablemente fue limpiada recientemente.
17.       Desgaste es indicador de autenticidad	El desgaste artificial es uno de los trucos mas usados por falsificadores.
18.       Monedas gastadas con bordes netos	Son probablemente falsas; o fueron hechas con cuños gastados que circularon poco.
19.       Letras rellenas como la D y A indican fundición	Cuños pueden astillarse y llenarse de metal simulando un molde de relleno.
20.       Una moneda de plomo deja una marca en un hoja de papel	Algunas monedas de plata también, sin embargo las monedas de plomo son muescadas fácilmente con la uña de un dedo.
21.       Si la moneda “timbra” al ser golpeada en su superficie es genuina	Muchas falsificaciones tienen esa característica y muchas genuinas no.
22.       Si la moneda fue tallada, es genuina	La base probablemente si, el producto evidentemente no.
23.       Identificar al falsificador elimina la amenaza	La dispersión se realiza habitualmente a través de intermediarios, diluyendo el seguimiento del origen.

Figura N°7: Didracma de Hyria, Campania, con “horn silver”.

Sayles recomienda a sus lectores un axioma sencillo: “si tienes que imaginar una peculiar serie de circunstancias para que una moneda sea autentica, probablemente no lo sea”.

Para la correcta identificación de sus piezas, un coleccionista tiene a su disposición el examen físico de estas, la textura, la patinación,  el estilo de la imagen, el uso de referencias bibliográficas e idealmente de otras piezas, el uso de instrumentos como lupas y microscopios, la luz ultravioleta y los imanes, las tablas de peso y de gravedad especifica de los metales.

Existe un método eficaz sin dañar la pieza para determinar esta variable. Utilizando la ley de Arquímedes, se pesa la moneda en agua y en aire, la diferencia de peso (es decir el agua desplazada), se divide por el peso en aire, dando la gravedad especifica, para la plata de 10.55, oro 19.3, cobre 8.96 y plomo 11.4.

Métodos mas sofisticados como el uso de Rayos X y Microscopia electrónica son utilizados en numismática forense en centros universitarios.

 Las falsificaciones, reproducciones y sobre-acuñaciones son una amenaza inherente al mercado del coleccionismo de monedas arqueológicas.

Por ello, este sencillo artículo pretende dar algunas luces sobre esta industria del engaño y las herramientas para combatirla, sin embargo, la experiencia compartida, el expertizaje honesto, libre de cualquier interés personal, la adecuada comunicación entre coleccionistas y por supuesto el aprendizaje a costa de ser víctima de piezas fraudulentas, son medios irremplazables para la detección de estas monedas; junto a la adecuada rigurosidad con el falsificador y distribuidor.

Así protegeremos nuestro precioso pasatiempo y permitiremos la conservación del patrimonio de nuestra cultura.

Bibliografía consultada:

         •         Classical Deception, Wayne Sayles, Krause Publications, 2001.

      •              La Detection des Faux en Numismatique, Aimé Cornu, Numismatischer Verlag, 1987.

      •            Ancient Grek Coins, Zander Klawanns, secon edition, Whitman Publishing Company, 1967.

Material gráfico de:

    •    http://www.calgarycoin.com/reference/fakes/fakes.htm
    •    http://www.forumancientcoins.com/fakes/index.php
    •    http://www.beastcoins.com/Fakes-Altered/Fakes.htm
    •    http://dougsmith.ancients.info/
    •    http://rg.ancients.info/