Denario Lucio Vero y Dracma Vologases IV. Victoria sobre los Partos.

Denario de Lucio Vero TR P VI IMP III COS II - Victoria sobre los Partos

Imperio Parto

Bajo el reinado de Vologases IV, los conflictos fronterizos con Roma se producían desde el 155 d.C., el ánimo de los partos y la humillación sufrida años atrás por el emperador Trajano no se olvida. En el salón del trono del palacio imperial se encuentra reunido el rey Vologases IV con sus generales de confianza debatiendo asuntos de estado.

General Phaatres:

-Señor, las políticas exteriores de Roma son inadmisibles, debemos hacer algo. No podemos estar asustados por su poder.

Vologases IV:

-¿Y en qué piensas Phraates?

General Phraates:

-Armenia, Señor, está ahora mal protegida y debe ser nuestra de nuevo. Si nos movemos con presteza podríamos tomarla y asustar a Roma con nuestro renovado poder. Hacerles ver que lo que pasó con el maldito Trajano no minó el ánimo del gran pueblo parto, que la Partia tiene su orgullo intacto.

General Mitrades:

-Phraates, estás loco. Un conflicto abierto con Roma nos llevaría a la ruina.

General Osrodes:

-Estoy de acuerdo con Phraates, los nuevos emperadores de Roma son inexpertos y quizá ante nuestro ataque contundente tengan miedo y replanteen su trato hacia nosotros con ventajas comerciales y territoriales. ¿Acaso eres un cobarde, Mitrades?

General Mitrades:

-Yo siempre sirvo a mi Rey. ¿Qué decisión tomáis Majestad?

Vologases IV, tras dudar unos segundos, dijo:

-Espero que los dioses y el pueblo me perdonen si estoy cometiendo en un error… Reunid al ejército. ¡Armenia es parta!

Año 162 d.C., Palacio Imperial de Roma (capital del Imperio Romano).
Los bisoños emperadores Marco Aurelio y Lucio Vero se encuentran despachando asuntos financieros sobre la remodelación del templo de Juno y el de Augusto en audiencia con un grupo de senadores en el momento en el que el Prefecto del Pretorio irrumpe en la habitación sobresaltado. Apoyado en el quicio de la puerta, el prefecto antes de articular palabra es recriminado por uno de los Senadores.

- ¿Cómo osa entrar así en audiencia privada con los emperadores?

Prefecto del Pretorio:

- Lo siento, señor, pero ha llegado un emisario de las provincias del Este con un mensaje urgente para sus majestades imperiales.

Marco Aurelio:

-Está bien, qué nuevas trae.

Prefecto del Pretorio:

-El prefecto Atidio Cornelio ha caído derrotado por las tropas de Vologases IV, el imperio parto ha invadido y tomado el control de las provincias romanas de Siria y Armenia.

Lucio Vero:

-¡Por los dioses! ¿Los partos en todo este tiempo no han aprendido nada de las ofensas a Roma? ¿No recuerdan el acero de las legiones de Trajano?

Marco Aurelio:

-Por eso mismo, mi muy caro y amado hermano. Lo recuerdan demasiado. Tarde o temprano pasaría esto. Ningún pueblo olvida las humillaciones del pasado. Senadores, si nos disculpan, terminaremos los asuntos de los templos en otro momento. Es hora de convocar para mañana a primera hora al Senado.

-Prefecto, mande a la guardia pretoriana a casa de los senadores comunicándoles la noticia de la sesión extraordinaria para mañana.

Al día siguiente, Senado de Roma.
Entronizados los emperadores frente al hemiciclo del Senado, se dispone a tomar la palabra Marco Aurelio.

-Senadores, Roma ha sido ofendida. El rey de la Partia ha tomado vilmente las provincias de Siria y Armenia. Quien ofende a la patria del gran Augusto debe ser castigado. He resuelto, para no dejar a Roma sin la gobernación de un emperador, entregar el mando de las legiones a mi hermano Lucio, que partirá con el beneplácito del Senado, hoy mismo, mientras yo permanezco atendiendo los asusntos del imperio desde aquí.

Senador:

-El Senado alaba la decisión del emperador y permite partir a Vero al frente Este. Que los dioses te protejan y Marte te de la victoria.

Lucio Vero:

-Que así sea.

Y al frente de sus legiones marchó Lucio Vero a encontrarse con los partos. Se sucederán cuatro largos años de fatigosas y crueles guerras entre ambos imperios. Vero recuperará el control de Armenia y Siria, y llegará a adentrarse en el mismísimo Imperio Parto hasta la ciudad de Media. Tomando las ciudades importantes de Seleucia, a orillas del Tígris, y Ctesifonte, donde sería destruido el palacio imperial parto por Avidio Casio en el 165 d.C.
Vologases IV, con su ejército destrozado y arrinconado en la zona este de su imperio, no le quedará más remedio que firmar la paz con Roma y ceder el oeste de Mesopotamia por la ofensa causada. En el año 166 d.C. regresaría Lucio Vero a Roma de manera triunfal, se acuñarían monedas recogiendo su victoria sobre los partos. Tanto con la efigie de Marco Aurelio como con la de Lucio Vero, he aquí una de este último:

Anverso: Lvcivs VERVS AVGvstvs ARMenicvs PARTHicvs MAXimvs
Busto laureado del emperador a la derecha.
Reverso: TRibvnicia Potestate VI IMPerator III COnSvl II
Victoria sujetando escudo sobre una palmera con la inscripción VICtoria PARthia. Representa la victoria sobre los partos.
Acuñado en Roma en el año 166 d.C.

Anverso: Busto hacia la izquierda del rey con barba y tiara adornada.
Reverso: Leyenda bilingüe, en la parte superior del campo está la leyenda en idioma parto: Volgasi Malka (Rey Vologases) y alrededor del arquero otras seis líneas en griego degenerado. Este rey parto luchó contra Marco Aurelio y Lucio Vero siendo finalmente derrotado en el 166 d.C.
Acuñada en Ekbatana en el 147-191 d.C.